Se inauguró en el año 1990 y fue ideada por los arquitectos Beth Galí, Màrius Quintana y Antoni Solanas. Fue el primer edificio de la ciudad concebido como biblioteca y también el primero en disponer de catálogo automatizado.
Lleva el mismo nombre que el parque, donde se encontraba el antiguo matadero de la ciudad, en homenaje a uno de los artistas catalanes más reconocidos internacionalmente. El parque también luce una de sus esculturas más emblemáticas, Mujer y pájaro, de 22 metros de altura.
La biblioteca ocupa una superficie de 750 metros cuadrados y la componen dos edificios: el ala infantil, en el lado mar, y el ala de adultos, en el lado montaña, conectados entre sí por una pasarela de cristal. Las dos alas disponen de planta baja y altillo.
Además, incorpora mejoras de eficiencia energética, se ha mejorado la calidad y el consumo de la iluminación; se han cambiado máquinas y renovado circuitos del sistema de climatización que harán que la biblioteca sea más confortable y tenga menos consumo, y se han instalado placas fotovoltaicas en la cubierta.
