Los alumnos de Elisava asumen un reto para promover el comercio emblemático e intercultural

La dirección de Comercio del Ayuntamiento de Barcelona ha planteado Escuela universitaria Elisava de Diseño e Ingeniería una iniciativa para que los alumnos elaboren propuestas a fin de promover el comercio intergeneracional e intercultural en el marco del proyecto europeo Decoding European Creative Skills  que se desarrolla en Barcelona durante esta semana. Se trata de un reto o desafío creativo planteado a los estudiantes en torno al comercio barcelonés.

Elisava lidera este proyecto con la participación de la Universidad Técnica de Eindhoven (Technische Universiteit Eindhoven) y la Universidad de Ciencias Aplicadas de Salzburgo (Fachhochschule Salzburg).  La dirección de Comercio y la escuela Elisava acordaron realizar esta experiencia mediante un convenio de colaboración.

Durante cinco días, estudiantes de Elisava, distribuidos en diversos equipos, analizarán las dos propuestas realizadas por la dirección de Comercio, que tienen el objetivo de preservar y promover el comercio emblemático barcelonés y el intercultural. Los alumnos trabajarán en equipo, debatirán sus conclusiones y presentarán una propuesta.

Preservar la singularidad de los comercios emblemáticos y promover el comercio intercultural

La dirección de Comercio ha planteado a los estudiantes de Elisava dos retos: el primero tiene como objetivo preservar la singularidad de los comercios emblemáticos de la ciudad a través del talento y la creatividad de los jóvenes. Este tipo de comercios han pasado de generación en generación conservando su carácter original y han hecho frente a las necesidades de modernización y los cambios en los hábitos de consumo. Estos establecimientos son los que contribuyen a que Barcelona pueda disfrutar de comercios singulares y únicos, dan vida al comercio de proximidad y favorecen la convivencia ciudadana en el espacio público.

El segundo reto: se pide a los alumnos que reflexionen y elaboren una propuesta que contribuya a la mejora de la percepción de la calidad del comercio intercultural a través de la cooperación con el comercio local de proximidad. En Barcelona, actualmente, como en otras ciudades, hay una convivencia de procedencia diversa, con costumbres, actividades y necesidades diferentes, y el comercio se convierte en un factor de integración. Pero muchos comercios no acceden a los recursos que ofrece el territorio en que están ubicados, y hay que conseguir una igualdad de condiciones de oportunidades para acceder a todos los recursos para este comercio.

Los alumnos presentarán al principio de la próxima semana sus conclusiones y propuestas concretas a la dirección de Comercio.