Comisaria: Chus Martínez
Inauguración: miércoles 16 de diciembre, 19 h
Visitas guiadas: martes. sábados y domingos, a las 18 h

A partir del concepto de singularidad, Serra ha concebido su nuevo trabajo como una gran instalación audiovisual que se proyecta en ocho pantallas. La inspiración originaria de esta propuesta deriva de un diálogo entre Albert Serra y Chus Martínez sobre el concepto que da título a la obra. Singularidad es el término con el que matemáticos e investigadores de la inteligencia artificial se refieren al momento en el que nuestra relación con las máquinas cambia, cuando la tecnología deja de ser una herramienta y comienza a ser un acompañante de la especie humana.

Este proyecto se acompaña de una edición de 32 páginas publicada por el Institut Ramon Llull y Mousse, disponible para su descarga gratuita desde la web del proyecto.

Este proyecto, seleccionado para proyectar el arte catalán en uno de los escenarios internacionales de mayor prestigio, llega ahora a Barcelona de la mano de La Virreina Centre de la Imatge y el Institut Ramon Llull. Se consolida así una colaboración iniciada con la itinerancia de la exposición 25%. Catalonia at Venice, una producción del Institut Ramon Llull para la 55ª edición de la Bienal de Venecia que, tras la amplia repercusión internacional, se presentó en las salas de La Virreina Centre de la Imatge en la primavera del 2014.

Cinco pantallas monumentales narran la extraña existencia de un grupo alrededor de un empresario y una mina. Resulta casi imposible hablar de una narración continua y, al tiempo, las escenas, las conversaciones nos cautivan con una facilidad inusual. Dinero, interés, provecho, posibilidad, futuro… todos hablan de lo que esperan mientras que el empresario, el gran mediador, promete “oro“.

El oro en sus labios nombra la promesa de una fuente, la mina. Una fuente de la que fluye una substancia -el metal precioso pero podría ser dinero en curso o bit coins- con la que poder especular. El orden del presente en la película esta marcado por escenarios casi irreales, por interiores “paganos“ faltos de la marca tecnológica, pragmáticos a la hora de reunir a un grupo que se mueve por el interés, por la explotación sexual y laboral y por la idea de que algo poderoso esta a punto de acaecer.

La película no tiene un orden narrativo, puede verse y entenderse de igual manera desde cualquiera de los cinco puntos de vista que se presentan en las salas. Lo que la cinta aborda es la idea misma de “civilización“, esto es una forma de organización social compleja centrada en la explotación de recursos. Una sociedad cerrada en si misma y con un corazón eminentemente económico que necesita desarrollar otras formas de inteligencia y otras formas de tecnología para subsistir. Singularidad se concentra en ese instante donde el deseo individual, la corrupción y los hábitos están en el lado opuesto de un “renacimiento“, están, de hecho inmersos en la más simple de las decadencias.

Sin solución de continuidad debido a que solo son posibles las relaciones homosexuales, la única salida es una extraña tecnología que aparece al principio y al final de la película, unas maquinas-cámaras -drones- destinados a robar a los que ya son ladrones.

Todo en la película habla del ahora, del abandono de la complejidad, de las aspiraciones facciones de los individuos, de la ausencia de inteligencia en las relaciones con los otros, pero también en la relación actual con las culturas, con el arte, con el rigor como el sinónimo futuro de la belleza.
 

Albert Serra (Banyoles, 1975) es director y productor de cine. Su primer film, Crespià, the film not the village (2003), no se llegó a estrenar comercialmente. Posteriormente, ha presentado Honor de cavalleria (Premio Barcelona de Cine a la mejor dirección novel y a la mejor película en v.o. catalana 2006) y El cant dels ocells (Premio Gaudí a la mejor película 2009). En 2009 también fue escogido para ser el icono del nuevo cine de vanguardia de la Quinzaine des Réalisateurs del Festival de Cannes.

En 2012 fue uno de los artistas seleccionados para participar en la dOCUMENTA de Kassel donde presentó la película Els tres porquets. Hace dos años se convirtió en el primer director catalán en obtener el premio a la mejor película del Festival de Locarno con Història de la meva mort (2013). Recientemente, ha sido invitado por los prestigiosos centros Pompidou de París (2013) y Bozar de Bruselas (2014) a presentarse con carta blanca.


Chus Martínez (La Coruña, 1972) es actualmente directora del Instituto de Arte de la Academia de Arte y Diseño FHNW de Basilea, Suiza. Licenciada en Filosofía e Historia del Arte por la Universidad Autónoma de Barcelona, también ha hecho un máster de comisariado en el Bard College de Nueva York. Su trayectoria profesional la ha llevado a ocupar los cargos de directora artística de la Sala Rekalde de Bilbao (2002-2005), de directora del museo Frankfurter Kuntstverein (2005-2008) y de conservadora jefe del MACBA (2008-2011). Más recientemente, ha trabajado como comisaria jefe de El Museu del Barrio de Nueva York y ha formado parte del equipo comisarial de dOCUMENTA (13) en Kassel, Alemania.

En 2005, Martínez fue la comisaria del Pabellón Nacional de Chipre para la 51ª edición de la Exposición Internacional de Arte - la Biennale di Venezia, con un proyecto de Panayiotis Michael y Konstantia Sofokleous. También formó parte del equipo asesor de la exposición Carnegie International en 2008 y participó como comisaria invitada en la 29ª Bienal de São Paulo de 2010. Además, ha presentado exhibiciones en museos de todo el mundo, ha colaborado en numerosos seminarios y conferencias y ha ejercido como miembro del jurado en certámenes de reconocido prestigio. Publica regularmente en revistas de arte.

ACTIVIDAD ASOCIADA

Miércoles 16 de diciembre
Albert Serra (artista), Chus Martínez (comisaria) y Jaap Guldemond (director de exposiciones de Eye Film Intitute, Ámsterdam)
En conversación
Idioma: inglés
Virreina LAB, 18h
Entrada gratuita. Aforo limitado