1799: el Ayuntamiento de Barcelona abre un aula educativa para niños sordos en el Saló de Cent.

Es la primera experiencia de un servicio escolar para personas sordas en el Estado español.

1820: se inaugura la Escuela Municipal de Ciegos.

1843: se inaugura la Escuela Municipal de Sordomudos.

1856: la escuela de Ciegos y la de Sordomudos se unen en una sola escuela.

1910: la escuela se amplía a personas con discapacidad intelectual.

1917: la escuela se divide en tres escuelas para atender las distintas necesidades, con líneas pedagógicas innovadoras.

Después de la Guerra Civil, se mantiene la educación de los niños con discapacidad gracias a la labor de las tres escuelas.

1950: se constituyen muchas asociaciones privadas de personas con diversidad funcional y se crean los Patronatos Municipales.

1979: el Ayuntamiento de Barcelona crea dos Patronatos Municipales: el de Disminuidos Psíquicos y el de Disminuidos Físicos.

Es la primera experiencia destacada de participación de personas con discapacidad en el Ayuntamiento de Barcelona.

Este es el inicio del actual IMPD, que ha ido evolucionando.

1982: se aprueba la Ley de Integración Social de las Personas con Discapacidad (LISMI).

Se crean comisiones de trabajo, servicios y recursos para atender las demandas y necesidades de las personas con discapacidad.

1986: se abre el Centro de Formación Profesional Ocupacional Pont del Dragó para jóvenes con discapacidad física grave.

Es un centro pionero, especializado en diseño gráfico, audiovisuales e informática.

1989: los Patronatos Municipales se fusionan y se crea el IMPD.

Las personas con discapacidad tienen participación directa en el Consejo Rector mediante sus representantes elegidos cada 4 años.

1992: se celebran los Juegos Paralímpicos de Barcelona.

Es la primera vez que se celebran en la misma ciudad que los Juegos Olímpicos e implica una gran apuesta por la accesibilidad urbanística y comunicativa que se consolida en los años siguientes.

2004: la celebración del Fórum de las Culturas en Barcelona impulsa la accesibilidad comunicativa en los actos y servicios públicos de la ciudad. 2009: los servicios municipales de atención ciudadana incorporan anillos magnéticos portátiles y servicio de interpretación en lengua de signos.

 

La inclusión, la accesibilidad y la diversidad son los valores que guían nuestra acción para conseguir la plena igualdad de derechos y la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad.

El IMPD fomenta el trabajo en red para dar soluciones conjuntas y crear servicios innovadores, como:

> Servicio de Asistencia Personal Barcelona

> Nuevo modelo de atención precoz en los CDIAP municipales

> Huertos en las azoteas gestionados por personas con discapacidad

> Cooperativa de inclusión laboral de personas con discapacidad que gestiona quioscos

> Aplicación móvil para mejorar la eficiencia del transporte puerta a puerta

> Banco del Movimiento, red solidaria de productos de apoyo...

2016: el Ayuntamiento firma la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad, aprobada por Naciones Unidas en 2006 y, por lo tanto, se compromete a seguir defendiendo los derechos del colectivo.

2017: se aprueba el Plan de Accesibilidad Universal para hacer la ciudad 100 % inclusiva y accesible.

2021: el diagnóstico del Plan de Accesibilidad Universal de Barcelona recibe el reconocimiento de ‘mejor acción local’ por parte del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).