El nuevo reloj de la ciudad
Fecha de publicación del documento: 03/01/2022
Año del documento original: 1865
En 1865, la ciudad de Barcelona estrenaba un nuevo reloj público. Situado en el campanario de la Catedral, como la maquinaria a la que sustituía —actualmente conservada en el Museo de Historia de Barcelona—, su creación fue a cargo del relojero Albert Billeter, vecino de Gràcia. El Ayuntamiento de Barcelona había aprobado su construcción en 1863 y empezó a dar las horas, por primera vez, a las doce del mediodía del 20 de enero de 1866. El documento original que aquí se presenta es el proyecto de embellecimiento de la torre de la campana que tocaba las horas del nuevo reloj, conservado en su archivo privado por el autor, el arquitecto Josep Oriol Mestres Esplugas, padre del artista Apel·les Mestres, a través del cual ingresó en el Archivo Histórico de la Ciudad. Está fechado el 26 de julio de 1864.
Además del alzado del proyecto ornamental, en las notas al margen se detalla de manera pormenorizada la historia del nuevo reloj de la ciudad y de sus campanas, así como de las modificaciones posteriores. En el texto se explica que la primera de las campanas creadas para el nuevo reloj no fue admitida “por haber salido pequeña y no tener el tono que se deseaba”, especificándose que, en el alzado, se trata de la campana dibujada a tinta. “En 27 abril de 1865 quedó colocado el armazón construido por D. Narciso Costa, cerrajero de San Esteban Sarrobiras”. El 6 de mayo de 1865, continúa la narración, se encargó una nueva campana de las horas y, de nuevo, “salió mal”. “En 10 agosto del mismo año se fundió otra campana Eulàlia, que fue admitida por el Ayuntamiento, bendecida por el señor Obispo D. Pantaleoni en 29 octubre, y subida a la torre el día 2 de noviembre: empezándose esta operación a las 7 y 25 minutos de la mañana, descansando en la plataforma hecha a la altura de baranda de la torre a las 10 y 1/2, y quedando definitivamente suspendidas en el armazón a las 3 y 26 minutos de la misma tarde”.
Gracias a las anotaciones del arquitecto municipal, conocemos con exactitud las características técnicas de esta nueva campana: “Pesa 134 quintales 15 libras, o sea en kilogramos 5.580,40”. Además de la campana de Santa Eulàlia, Josep Oriol Mestres también aporta datos de interés sobre la histórica campana de los cuartos del reloj barcelonés, la Honorata, que tenía un peso de 1.279,20 kg. En su alzado, se hace referencia a esta con la letra a y se especifica que representaba “la antigua que fue fundida en el año 1577 y bendecida en 13 de se[p]tiembre del propio año”.
De gran interés es la controversia de la que se informa acerca del presupuesto de construcción del coronamiento que es protagonista de este documento. El arquitecto muestra su perplejidad ante el hecho de que, en su momento, “el Ayuntamiento hizo un ajuste total con D. Alberto Billeter y en el se consignó, al bulto, una cantidad para el armazón sin haberse estudiado un proyecto”. Y añade: “Y me encontré atadas las manos con la tal cantidad tan arbitrariamente consignada. Se construyó este armazón según el plano y detalles del arquitecto de la Catedral, D. José O. Mestres en el pueblo de Sant Esteban Sarrobiras y se tuvo armado en la plaza el mismo pueblo”.
En la parte superior derecha del proyecto de Mestres Esplugas también figura una nueva nota que ilumina, con gran viveza, la historia de este coronamiento: “En 6 noviembre de 1864 se hizo esta modificación en el segundo cuerpo por haber determinado el Ayuntamiento hacer nueva la campana de los cuartos, dándola un peso de 25 a 30 quintales; y cuando subí a Sant Estaban Sarrobiras para exminar el armazón, accedí a petición del relojero D Alberto Billeter de reforzarlo un poco más, y proyecté una adición bajo la cual fue concluido y colocado el armazón”. El arquitecto concluye: “Tuvo esta última operación en 27 abril de 1865”.
Más información:
Fondo Apeles Mestres del AHCB:
Reportaje “ Descubre los relojes públicos de Barcelona”:
Antiguo reloj de la ciudad en el MUHBA: