La Fiesta de La Mercè: 150 años de la Fiesta Mayor de Barcelona
Fecha de publicación del documento: 23/09/2021
Año del documento original: 1871
Este año, Barcelona celebra el 150 aniversario de la creación de la Fiesta Mayor de La Mercè, patrona de la ciudad. La veneración municipal a la Virgen de la Mercè es oficial desde 1687, cuando fue declarada patrona religiosa de la capital catalana. Fue una decisión del gobierno del Consejo de Ciento para agradecerle que liberara la ciudad de una plaga de langostas. No fue hasta casi dos siglos más tarde, en 1868, cuando el Vaticano la proclamó patrona de la diócesis de Barcelona, a las puertas de la Revolución de septiembre que tuvo lugar aquel mismo año y que inauguró el periodo del Sexenio Democrático, que culminó con la Primera República.
Una figura clave de la reinvención de la festividad de La Mercè como fiesta mayor de la ciudad fue Francesc de Paula Rius i Taulet. En tiempos de la alcaldía de Francesc Soler, en 1871, el concejal Rius i Taulet era el encargado de la programación de las fiestas cívicas e impulsó la primera gran celebración pública de la Fiesta Mayor de Barcelona. Entre los días 24 de septiembre y 1 de octubre de 1871, los barceloneses y las barcelonesas disfrutaron de un programa festivo nunca visto hasta entonces: cultura popular, con sardanas, gigantes y castillos humanos en la plaza de Sant Jaume; una carrera de caballos y otra de velocípedos, en un estadio efímero levantado en la Ciutadella, además de competiciones deportivas en el puerto, tanto para barcos como para nadadores, y fuegos artificiales. En el nuevo edificio de la Universidad también se instaló una exposición representativa de las provincias catalanas. Estas son solo algunas de las numerosas actividades celebradas con motivo de aquella primera Fiesta Mayor de Barcelona organizada por el Ayuntamiento.
Posteriormente, el propio Rius i Taulet se convirtió en el célebre alcalde de Barcelona que dirigió la política urbana de expansión de la ciudad coincidiendo con el despliegue irreversible de L'Eixample y la celebración de la Exposición Universal de 1888. Después del triunfo de los partidos catalanistas y republicanos en las elecciones municipales de 1901, en 1902 el nuevo Ayuntamiento organizó la primera gran celebración de las Fiestas de La Mercè del siglo XX. Aquel fue un hito continuado en los años posteriores, aunque de modo desigual. La tensión entre el carácter popular y festivo de la celebración y el contrapunto religioso y conservador fue una constante durante buena parte del siglo pasado como consecuencia tanto del contexto político local como histórico español.
A lo largo de su siglo y medio de historia, guerras y epidemias han provocado la interrupción de los actos oficiales de la Fiesta de La Mercè, tal como ocurrió en los años 1873-1876, 1884-1885, 1936-1938 y 1971. Tras el restablecimiento del ayuntamiento democrático, La Mercè no se ha vuelto a suspender. Todo lo contrario, después de los atentados terroristas de agosto de 2017, La Mercè se reivindicaba como punto de encuentro. En su pregón, la filósofa Marina Garcés afirmaba:
Este año habíamos recordado con dolor los 30 años de Hipercor, como si fuera un pasado lejano. Pero estos días, la violencia global ha irrumpido en Barcelona. Durante estas Fiestas de La Mercè, todos llevaremos en nosotros una ausencia igualmente dolorosa: la de las personas que no volverán nunca más a Barcelona ni a sus fiestas, no porque no quieran, sino porque el 17 de agosto perdieron la vida en la Rambla, en la Diagonal y en el paseo de Cambrils.
Y añadía:
Por todos ellos y por todos los que han quedado heridos para siempre con sus muertes, y también por todos los que mueren debido a la violencia cada día más allá de nuestras malditas fronteras, hagamos de esta Mercè un reencuentro con la ciudad, con sus calles y plazas y, sobre todo, un reencuentro entre nosotros. Mirándonos a los ojos no solo para emocionarnos un momento, sino para romper la indiferencia que normalmente nos separa y la hostilidad que cada vez más a menudo nos enfrenta.
El etnólogo y museólogo Josep Fornés también ha afirmado, a propósito de la historia de la Fiesta de La Mercè:
La fiesta de una ciudad es un espejo de la vida social de la gente que vive en ella, es una expresión a menudo catártica de las pasiones y utopías de la sociedad, es el reflejo de sus virtudes y vergüenzas, es a menudo también la representación simbólica de sus anhelos de futuro y un reencuentro cíclico con su patrimonio inmaterial. Por este motivo podemos entender la fiesta como un espejo de la ciudad, un espejo que desdibuja o retoca la realidad social, pero que permite también ver más allá como si entráramos en el inconsciente colectivo.
Y añade:
Una ciudad no se puede abarcar con una única mirada, se necesita una visión calidoscópica, una observación múltiple para comprender la complejidad que contiene. Observando la fiesta observamos la ciudad. La dimensión simbólica de la fiesta ha sido con frecuencia un elemento de conservación, pero también de cambio. Inventando la fiesta, la ciudad se inventa a sí misma.
Más información:
Colección de carteles del AHCB:
https://catalegarxiumunicipal.bcn.cat/ms-opac/permalink/1@398665
Noticia “Una historia gráfica de las Fiestas de La Mercè”, AHCB:
https://ajuntament.barcelona.cat/arxiumunicipal/ca/noticia/una-historia-...
Noticia “El cartelismo, un arte con mucha historia”, AHCB:
https://ajuntament.barcelona.cat/arxiumunicipal/arxiuhistoric/ca/noticia...
Dosier de prensa “La Mercè celebra sus 150 años en una edición muy especial”, ICUB:
https://ajuntament.barcelona.cat/premsa/wp-content/uploads/2021/09/Dossi...
Exposición "Anunciando La Mercè. Los carteles de la Fiesta Mayor de Barcelona”, Casa de los Entremeses:
http://lacasadelsentremesos.cat/anunciant-la-festa-els-cartells-de-la-fe...
Artículo de Josep Fornés i Garcia “La Mercè inventada”. Mediateca de la web festes.org: