10 Mayo | 2018
El día 10 de mayo, poco antes del mediodía un animoso conjunto de unos veinte socios del Consell de Cent, nos pusimos en marcha, para comprobar "in situ" el esperado final de las obras del Mercat de Sant Antoni.
Acompañados por Pere Sirvent Director de Proyectos de los Mercados Municipales y de los arquitectos autores del proyecto y directores de las obras Pere Joan Ravetllat y Carme Ribas, y con la alegría que caracteriza a los ex concejales municipales, iniciamos la visita descubriendo la nueva calle semi sepultada que transita por debajo el mercado entre la antigua muralla y la contra-muralla, que fueron descubiertas en el transcurso de las obras, y que han quedado incorporadas al proyecto, para que puedan ser visitadas por todos los ciudadanos. No es el único descubrimiento arqueológico del conjunto, dado que también se ha encontrado un tramo de la antigua Vía Augusta que también será musealizada y podrá aun así ser visitada.
Esto sólo es el aperitivo de una obra ciertamente compleja, que en cualquier caso será recomendable ir descubriendo poco a poco. Estamos hablando de 60.000m² de obra entre las diferentes plantas, que darán acogida a 53 negocios alimentarios, más noventa de no alimentarios, con los consecuentes locales de servicios y logística de carga y descarga, a los que hay que sumar cuatrocientas plazas de aparcamiento, el mercado de los libros, sellos, postales, cómicos, etc., así como un supermercado, un gimnasio y un local por el vecindario.
En un proyecto de esta complejidad, donde para hacerlo todavía más complicado, han ido apareciendo los restos arqueológicos mencionados, no tiene que extrañar a nadie que las obras se hayan alargado en el tiempo. En cualquier caso, una vez hecha la visita, te queda la agradable impresión que todo ha sido con objeto de bien, y que si bien el camino ha sido largo, todo parece estar muy meditado y en su lugar.
Desde la creación de nuevos espacios y plazas públicas, pasando por la innovadora climatización por geotèrmia y la cuidadosa rehabilitación del edificio histórico, hasta la versatilidad de la utilización prevista donde cada una de las partes y negocios del conjunto podrán funcionar de manera independiente, todo hace pensar que a partir de la inauguración que se divisa cercana este renovado y ampliado equipamiento de la ciudad, pasará a ser un icono de esta nuestra Barcelona que nunca tiene bastante.
Felicitaciones cordiales, a todos los que a lo largo de casi diez años, lo han hecho posible!
Xavier Valls
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