Espiritualidades afroatlánticas I Santa Marta y sus vueltas
La performance y charla de la escritora, artista y periodista Johan Mijail nos sumerge en el lenguaje discursivo del travestismo, en comunicación con la metrésa Santa Marta.
Esta tercera sesión del ciclo Espiritualidades Afrotlánticas tuvo lugar el 17 de mayo en el espacio de Periferia Cimarronas, en el distrito de Sants-Montjuïc. El ciclo “Espiritualidades afroatlánticas” ha sido un impulso común organizado por el Espai Avinyó y la Oficina de Asuntos Religiosos (OAR) y comisariado por Periferia Cimarronas, cooperativa gestionada por la comunidad afrodescendiente.
Las distintas sesiones han sido planteadas como un ejercicio de memoria y de autorrepresentación de las diásporas afrodescendientes de la ciudad, que proponen poner de relieve la dimensión histórica de sus tradiciones y espiritualidades en tanto estrategia de supervivencia y construcción de identidades vinculadas a la africanidad. Dimensiones que siguen siendo importantes en los contextos afroatlánticos y del Caribe, también presentes en Barcelona.
“Quiero presentarles un espacio negado: el de la santería afrodominicana”, dice Johan Mijail, nacida en Santo Domingo, República Dominicana, reclamando por una nación “que se considera blanca, cuando su gente es negra”. Continuando con la lectura que da inicio a su performance, Johan lee un fragmento de su reciente fanzine “La dominadora” (Catinga ediciones, 2022) donde es llamada por Santa Marta, espíritu que, en sus palabras, mueve las “matas de guayaba, de tamarindo y de chinola para que caigan sus frutos y les niñes dominicanes y haitianes los coman”.
La performance “Santa Marta y sus vueltas” termina con un diálogo dinamizado por Iki Yos Piña, de Periferia Cimarronas, para reflexionar sobre la práctica encarnada de Johan Mijail, que nos permite conectar con fiestas y rituales afro-trans-atlánticos, a la vez que transitar las transfiguraciones ficcionadas en torno a las identidades de género y la existencia negra.
Compartimos algunas reflexiones surgidas del diálogo:
- A propósito del dibujo (beber) realizado con harina que realiza en Johan su performance, hablamos sobre les “servidores de misterios”; las personas que trabajan en la santería o 21 división. En su actuación realiza el beber en llamado a Santa Marta, La Dominadora, reina del amor, altar que conoce en su infancia en Santo Domingo por su madre.
- La espiritualidad es una práctica de resistencia sexo-género afectiva: “siento que la reina Santa Marta me ha permitido encontrar espacios de disidencia”, dice Johan, refiriéndose también al travestismo en tanto posibilidad discursiva y de pensamiento.
- Aparece la escritura como “metodología precaria de producción” en sintonía con las tradiciones espirituales y sus imaginarios. Johan nos recomienda les autores de la editorial afrocentrada: Catinga ediciones. Además recomienda Marassá y la nada de Alanna Lockward, la obra de Dagoberto Tejeda y de Josefina Baez y por supuesto, sus libros como Chapeo (2021).
- La artista propone la posibilidad que los altares de la santería sean un derecho humano antirracista, que existan en el espacio público y sean lugar de encuentro y memoria, espacios para la existencia de cuerpos leídos como diferentes: “cuerpos que sirven de puente entre el misterio y lo humano” en las festividades del Caribe.