Comer de una manera consciente implica preguntarse de donde viene lo que consumimos, como se ha elaborado y en qué condiciones. Significa tomar el control sobre nuestros hábitos alimentarios y no delegar. O en otras palabras, significa ser soberano, poder decidir, en cuanto a nuestra alimentación. Esta es la esencia de la fermentación. Un proceso que consigue que los microorganismos acontezcan colectividad. Comunidad. Como técnica es accesible para todo el mundo y, como herramienta, nos permite dotar de identidad los productos que consumimos y dar un paso más en su circuito de elaboración.

En esta conversación a la fresca, hablaremos de temas tan variados como los imaginarios alrededor de la fermentación, de las formas en cómo concebimos la comida, de las curas o de hacer comunidad, entre otros. Seguidamente, en el taller de Kombucha pondremos sobre la mesa conocimientos y habilidades alrededor del aprovechamiento y de la generación de sabores. Nos preguntaremos: ¿Cuál es la relación entre la fermentación y la soberanía alimentaria? ¿Cómo construir prácticas alimentarias que rompan con las formas tradicionales de consumo? ¿Cómo incentivar una educación continuada que interrelacione alimentación, sostenibilidad y hábitos desde una perspectiva intercultural?

NOTA: Aforo limitado únicamente con inscripción previa.

¡Te invitamos a traer restos de comida (frutas, hierbas o grano) que tengas por casa!