Avispa velutina
La avispa asiática (Vespa velutina nigrithorax) es una especie exótica invasora que hace peligrar la biodiversidad y los insectos de nuestro ecosistema, sobre todo las abejas de la miel, de las que se alimenta. En el año 2018 se detectó por primera vez dentro de los límites del Parque Natural de Collserola.
La especie
La avispa asiática o avispa velutina (Vespa velutina nigrithorax) es una especie exótica invasora que pone en peligro la biodiversidad y la supervivencia de otros insectos de nuestro ecosistema, sobre todo las abejas de la miel, de las que se alimenta. Se detectó por primera vez en 2018 dentro de los límites del Parque Natural de Collserola.
¿Qué hace el Ayuntamiento?
El Ayuntamiento de Barcelona cuenta con un servicio de control y retirada de nidos de avispa asiática en el espacio público que actúa a demanda, cuando la ciudadanía o la Guardia Urbana comunican incidencias. El dispositivo municipal consiste en realizar una inspección y coordinar la actuación para retirar o inutilizar los nidos con la colaboración de otros servicios, en caso necesario. La actuación garantiza la seguridad de las personas, pero sobre todo protege la biodiversidad.
La estrategia de control de la población de avispas velutinas es competencia de la Generalitat de Catalunya.
Convivencia con la ciudadanía
Mantén la calma
Las velutinas no son más agresivas que las avispas comunes y no atacan a menos que se las perturbe, si se sienten amenazadas o defienden el nido. De hecho, no todos los individuos pican, solo las hembras tienen aguijón. Las picaduras tampoco suponen mayor riesgo para las personas que las de cualquier otro insecto.
Por tanto, si se te acerca una avispa, mantén la calma y no hagas movimientos bruscos. Evita dejar comida o bebidas dulces expuestas y cierra bien las bolsas de basura y los contenedores, especialmente con restos de comida, ya que las atraen.
Retirada de nidos
Puedes dar aviso de la presencia de nidos en la vía o espacios públicos en el Teléfono del Civismo (900 226 226) para activar el servicio de recogida y eliminación. Si el nido se localiza en un espacio privado, es la propiedad quien debe hacerse cargo de la retirada.
Los nidos no son peligrosos si no se les molesta, lo importante es no manipularlos y mantener una distancia prudencial.
Hay que tener en cuenta que después del servicio de eliminación, los nidos pueden quedar enteros y visibles, pero ya no están activos. Solo permanece la estructura del nido, sin avispas.
¿Sabías que...?
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Las avispas velutinas construyen dos tipos de nidos: los primarios y los secundarios. Los primarios son pequeños, del tamaño de una pelota de tenis, y se encuentran en lugares protegidos como garajes o cajas de persiana. Los construye la reina fundadora en primavera y sirven como base inicial hasta que nacen las primeras obreras.
Con el crecimiento de la colonia, las avispas trasladan la actividad a un nido secundario, mucho mayor, que puede superar los 50 centímetros de diámetro y se ubica habitualmente en zonas elevadas como árboles de hoja caduca, pero también pueden aparecer en fachadas, tejados o incluso en el suelo. Están hechos con fibras vegetales, que las avispas combinan con saliva. Su forma es redondeada o ligeramente cónica, y a menudo tienen una abertura lateral por donde entran y salen los individuos.
Cuando llega el invierno, los nidos quedan abandonados porque las avispas adultas mueren, excepto las reinas fecundadas, que entran en diapausia, un estado de inactividad fisiológica. El nido abandonado se deteriora de forma natural, lo que significa que los nidos que vemos en otoño o invierno ya no tienen actividad.
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Las avispas velutinas están más activas durante la primavera, verano y otoño, especialmente entre abril y octubre. El ciclo comienza en primavera, cuando la reina fundadora sale de la hibernación y construye el primer nido. A medida que avanza la temporada, la colonia crece y las avispas se vuelven más visibles y activas, sobre todo a finales de verano.
Durante el invierno, la colonia desaparece, las avispas adultas mueren y solo sobreviven las reinas fecundadas, escondidas en lugares protegidos, como rendijas, troncos o edificios, esperando a que llegue la primavera para iniciar una nueva colonia.
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La picadura de la avispa velutina no supone más riesgo que la picadura o mordida de cualquier otro insecto. Suele provocar dolor intenso, enrojecimiento, hinchazón local y, en algunos casos, picor o sensación de ardor en la zona afectada. Lava la picadura con agua y jabón para evitar infecciones, y aplica frío local para reducir la inflamación y el dolor.
En caso de que aparezcan síntomas no habituales, tengas más de una picadura, que la picadura se haya producido dentro de la boca o que seas alérgico o alérgica a esta avispa o no sepas si lo eres, el teléfono de asistencia habilitado es el 061.
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