¿Por qué se han adaptado tan bien a Barcelona?
Los entornos urbanos son zonas propensas a que algunas especies proliferen y se puedan convertir en una plaga, porque la ciudad propicia un microclima favorecedor, disponen de agua y de alimento, ocupan nichos ecológicos vacíos y no hay elementos de regulación natural.
Como causas específicas, encontramos que la franja climática de Barcelona coincide con la de sus áreas de origen.
Acciones de prevención y control que hay que establecer
Los métodos de control que se basan en la contracepción son los más indicados para reducir la población.
Actualmente solo se actúa sobre los nidos en época de poda y en los que tienen riesgo de precipitarse. No obstante, en el caso de las cotorras se está estudiando si las medidas de control sobre elementos estructurales, como eliminar los nidos, tienen un efecto real sobre el control de la población.