Centre Cívic Cotxeres Borrell

Del tranvía... ¡al teatro! Una antigua cochera de tranvías construida a finales del siglo xix se convirtió en un espacio vacío que, durante muchos años, no tuvo un uso definido. Estuvo cerca de convertirse en un bloque de pisos y, también, en una macrocomisaría de la Policía Nacional, pero finalmente, y gracias a las reivindicaciones de los vecinos de la zona, acabó albergando distintos equipamientos, entre los cuales el Centro Cívico Cotxeres Borrell, especializado en artes escénicas.  Transporte barcelonésEn el año 1891, la Compañía Anónima de Tranvías de Barcelona solicitó los permisos correspondientes para construir una cochera y unas cuadras en la esquina de las calles de Viladomat y Marqués de Campo Sagrado, un proyecto que firmó el arquitecto Ezequiel Porcel.El inmueble se amplió en años posteriores para incorporar un depósito de coches y unos talleres que daban servicio a la empresa de transporte.En aquellos años, el transporte urbano estaba en manos de empresas privadas, aunque a partir de 1958 el servicio se municipalizó con la creación de la Sociedad Privada Municipal de Tranvías de Barcelona, antecedente de Transports de Barcelona. Ni viviendas ni comisaríaTransports de Barcelona se había hecho cargo del edificio, aunque en cierto momento dejó de usarlo. Fue entonces cuando el Instituto Municipal de la Vivienda proyectó la construcción de un bloque de pisos en el solar que ocupaban las antiguas cocheras.El bloque comenzó a construirse tal y como estaba previsto, pero las obras quedaron paralizadas poco después del inicio y no se terminaron.Mientras tanto, la Associació de Veïns de Sant Antoni reclamaba que los terrenos se destinaran a equipamientos de carácter deportivo y/o escolar para el barrio.Las reclamaciones de los vecinos se intensificaron todavía más cuando, en 1984, el Ayuntamiento anunció que cedía el espacio al Ministerio del Interior para construir una macrocomisaría. La intensidad de las protestas consiguió que, finalmente, en 1987, el Ministerio renunciara al proyecto. Hormigón, cristal y metalEn diciembre de 1989, el Ayuntamiento presentaba un nuevo proyecto con el objetivo de construir en este emplazamiento un polideportivo con aparcamiento y una zona ajardinada.En el año 1998, en el edificio —un moderno inmueble de hormigón, cristal y metal— se inauguró el Centro Cívico Cotxeres Borrell y, en 2001, se añadió al conjunto la escuela pública Ferran Sunyer. Apoyo a la creación escénicaEl Centro Cívico Cotxeres Borrell desarrolla actualmente todo tipo de actividades lúdicas y culturales, pero tiene una programación especialmente dedicada al mundo de las artes escénicas.Performance, comedia y humor, acrobacia, circo, trapecio, danza, canto, improvisación... son algunos de los géneros escénicos que tienen su espacio en este equipamiento.Entre los programas más destacados del centro está el Laboratori Tísner, dedicado a dar apoyo a la creación escénica emergente, y la escuela de artes escénicas Petit Tísner, dirigida a los más pequeños.