Vendrán las flores
Diez años después de ser declarada ciudad literaria por la UNESCO, en 2015, Barcelona recibe otro importante reconocimiento en este sentido: es la invitada de honor de la 39.ª edición de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL).
Se trata de un hito relevante para la ciudad, ya que la FIL es una feria de referencia mundial: es la segunda más importante, por volumen de negocio, después de la de Frankfurt. Punto de encuentro de la industria cultural en castellano, es la cita cultural más destacada de Iberoamérica: su festival literario, que se celebra durante los nueve días de la feria, es el más grande del mundo. Participan en la FIL cerca de 750 autores y autoras de 49 países distintos y en ella coinciden más de 2.000 sellos editoriales y se organizan más de 3.000 actividades. La presencia de profesionales es importante: se reúnen alrededor de 20.000, pero la participación del público quizás sea lo más impresionante: en el 2024 batió su propio récord, con más de 900.000 visitantes.
Barcelona en la FIL: Vendrán las flores
Del 29 de noviembre al 7 de diciembre, Barcelona presentará una programación propia que dialogará con la de la FIL y que quiere servir para dar a conocer la Barcelona literaria: una ciudad que es capital editorial de autores y autoras en catalán y en castellano, y referencia indiscutible del mercado latinoamericano.
Celebramos los libros cada día, a través de una red única de bibliotecas y librerías, auténtico tejido cultural de Barcelona. Es la sede de los mayores grupos y un vivero en continuo crecimiento de editoriales independientes, grandes y pequeñas, así como de agencias literarias, imprentas, profesionales de la distribución, la traducción, la corrección, etcétera. El sector del libro tiene un papel muy importante en la ciudad.
Hay que destacar que la presencia de Barcelona en la FIL es también una oportunidad única para explicar la ciudad desde muchos otros ámbitos que también forman parte de la feria. En los programas FIL Ciencia y FIL Pensamiento se contará con notables participantes procedentes de Barcelona. El diseño sigue siendo un elemento puntero y distintivo de la ciudad y eso se verá reflejado en varios aspectos de nuestra participación, desde el pabellón hasta las exposiciones, que recogerán experiencias artísticas digitales recientes. Cada día llenaremos la FIL de música y artes escénicas, con intérpretes y espectáculos consolidados también en México y otros por descubrir. En Cataluña disponemos de una academia de cine propia y las producciones catalanas viajan por todo el mundo: viajarán también a Guadalajara.
Para presentarnos en Guadalajara, hemos elegido a la mejor embajadora posible: Mercè Rodoreda. Nuestro lema, “Vendrán las flores”, es un fragmento de uno de sus cuentos: las flores como vínculo con Guadalajara, conocida como la ciudad de las rosas, y como símbolo del Día de Sant Jordi. La literatura de Barcelona se abre, como las flores, y no se detiene. En las flores encontramos asimismo la idea de ciclo, del relevo, que puede explicar la relación de Barcelona con la literatura y con México: desde los años del exilio, en los que México fue tierra de acogida de escritores catalanes, hasta los del boom literario, en los que Barcelona se llenó de literatura latinoamericana. Como invitada de honor, Barcelona quiere contar estas y otras muchas historias. Y lo haremos, cargados de flores.
