Historia
La historia de una ciudad que vivió amurallada hasta el año 1859 y que hoy es el territorio que queda rodeado por la avenida del Paral·lel, las rondas, la calle de Pelai, el paseo de Lluís Companys y el parque de la Ciutadella. Ciutat Vella está formado por cuatro grandes barrios que atesoran muchos otros históricos, con fuerte personalidad y homogeneidad propias. En el sur, encontramos la Barceloneta, el barrio más joven, creado a mediados del siglo XVIII con la excusa de realojar a los desplazados de la Ribera por la construcción de la Ciutadella; en poniente, el Raval, nacido a partir de los caminos rurales extramuros de la ciudad, que fue la cuna de la Revolución industrial del siglo XIX; en el centro, el Gòtic, la manifestación urbana más antigua de Barcelona; y en levante, Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera, la extensión medieval de la ciudad. El territorio urbano de Ciutat Vella es un gran marco de tensiones y conflictos estructurales, relacionales y sociales. Las relaciones actuales no se entienden sin interrelacionar la aportación del pasado con las actuaciones del presente. La larga permanencia de Ciutat Vella intramuros configuró una realidad de mínimas aireaciones y perspectivas. Una vez liberada de este cinturón físico y psicológico, se vio sometida a procesos de degradación permanentes hasta la segunda mitad de los años setenta, cuando el desarrollismo se agotó y el modelo municipal autoritario dio paso al proceso de democratización de la sociedad. La combinación de estos dos últimos factores consolidó las bases para una política de regeneración urbana llevada a cabo en Ciutat Vella en las últimas décadas, durante las cuales las viejas operaciones sistemáticas de demolición y sustitución han evolucionado para convertirse en intervenciones de conservación y rehabilitación.