El REC mueve el comercio del barrio

Cuándo

9/10/2018

“Es dinero que se gasta en el barrio y hay que aprovecharlo”, afirma Cristina Soria sobre la puesta en marcha de la moneda ciudadana REC. Es presidenta de la Asociación de Comerciantes Zona Nord y tiene una herboristeria en Ciutat Meridiana. Josep Jordà, panadero en la Trinitat Vella y miembro de la asociación de comeciantes de Trinitat Vella, destaca: “Estamos muy ilusionados porque es una moneda para el barrio, se moverá por aquí”.

La experiencia de comprar en las tiendas con la moneda REC se ha puesto en marcha hace apenas unos días en diez barrios del eje Besòs de Barcelona. Es una moneda digital que nace en el marco del proyecto B-Mincome, con el apoyo de la Unión Europea. De momento, el Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en circulación unos 42.000 euros en REC, procedentes del primer pago del 25 % del apoyo municipal de inclusión (SMI) a 315 usuarios del B-Mincome.

Cualquier persona que quiera comprar con REC puede intercambiar euros por la nueva moneda ciudadana de Barcelona y utilizarlos en los comercios que aceptan los pagos. Funciona a través de una aplicación en el móvil que no comporta costes y muestra los comercios donde se puede comprar con REC.

Recuperar clientes

El REC es una iniciativa que tiene como objetivo promover el comercio de proximidad en los barrios. En los escaparates de los comercios participantes en la experiencia está el distintivo que informa de que se acepta el pago en REC. Los clientes, desde hace unos días, preguntan a los comerciantes por la novedad.

Loli tiene una papelería a poca distancia de la herboristería de Cristina, en la avenida de los Rasos de Peguera de Ciutat Meridiana. Se ha estrenado con tres clientes que le han comprado productos de papelería con REC. Y son clientes que no había visto desde hacía mucho tiempo. Los ha recuperado y, además, con los REC, dice que ahora le compran más de lo que solían hacer. Como comerciante ve la experiencia con muy buenos ojos: “Estoy muy contenta. Porque ahora los clientes, que disponen de los REC, conocen mejor la tienda, ven que hay más productos”. Loli, como Cristina y Josep, son comerciantes pioneros en la aceptación del REC para los pagos en sus tiendas.

Hacer que otros comerciantes se interesen

La presidenta de la Asociación de Comerciantes Zona Nord está satisfecha de que la introducción del REC haya atraído la participación de otros establecimientos. “Como asociación, estamos trabajando para hacer que se interesen más comerciantes, y que sus tiendas sean de productos de primera necesidad”. Recientemente, dos comerciantes pakistaníes, con una carnicería y una frutería, respectivamente, también han abierto sus puertas al REC y, además, se han asociado a Zona Nord. Cerca de una veintena de los 44 comerciantes asociados a esta entidad se han implicado.

A Cristina le gustaría que la experiencia fuera más allá, por ejemplo, que las tasas municipales, o la cuota de los autónomos de la seguridad social, se pudieran pagar con REC. No obstante, de momento espera que nuevas acciones de comunicación lleguen a más vecinos y comerciantes.

Explica que, en Ciutat Meridiana, hay 260 familias que se benefician del apoyo económico del SMI, y si estas familias disponen de REC, los destinarán a compras en el barrio, lo que supondrá un incentivo para los comercios de proximidad.

Ventajas de comprar con REC

A la Trinitat Vella van a comprar muchos vecinos de la Trinitat Nova de forma regular, apunta el panadero Josep Jordà, miembro de la asociación de comeciantes de Trinitat Vella. Explica que, entre los dos barrios, hay 150 familias que reciben el apoyo del SMI y a quienes se les puede ofrecer un servicio con pago en REC.

“Estamos haciendo reuniones con muchos comerciantes para que participen”, indica. “Es cierto que todavía hay quien primero quiere esperar a ver cómo funciona todo, pero cuando los clientes vean que un comercio acepta el pago en REC, será una ventaja para este establecimiento ante otro”. Hoy por hoy, seis comercios del barrio de la asociación Trinitat Comerç ya han abierto sus puertas al REC. Coincide con Cristina en que en esta fase inicial se necesitan comercios de productos de uso cotidiano para facilitar la introducción de la moneda en el barrio.

Una moneda para el barrio y una experiencia digital del comercio

Para Josep, el REC “es una moneda para el barrio”, por lo que tiene que beneficiar al territorio y revitalizarlo. “Yo también haré compras con los REC —asegura—, porque creo que es importante que se utilice en nuestro entorno más próximo, y evitar estigmatizar la moneda. Desde la junta de comerciantes lo vemos muy claro”.

Josep Jordà explica que la experiencia sirve también para que los comerciantes puedan hacer su entrada en el mundo digital de las ventas. Su panadería –Forn Trinitat- tiene página web y presencia en las redes sociales, y dice que el REC, que es moneda digital, le permitirá explorar nuevos caminos también en la venta en línea. Además de querer fortalecer la cohesión social en los barrios, el REC abre más expectativas.