A diferencia de la mayoría de ciudades europeas, Bruselas no tiene piscinas exteriores. La carencia de estos espacios ha provocado la pérdida de un vínculo en el que vecinos, amigos y familias puedan unirse para socializar y disfrutar de su entorno. Sin embargo, ya ha nacido un proyecto que busca solucionar este problema. Pool is Cool es una iniciativa que empezó en 2015. Liderato por un grupo de ciudadanos y entusiastas de la natación, este proyecto se centró inicialmente en la organización de actividades de natación en los ríos y lagos de Bruselas.
Actualmente el equipo de Pool is Cool ha conseguido que su iniciativa sea escuchada y tomada muy en serio por el gobierno de Bruselas, que, a su vez, ha dado todas las facilidades a este proyecto, que ya se ha ganado el corazón de los niños, jóvenes y adultos.