“Entrar en la InnoBAdora+ nos dio una estructura”
Entrevista sobre la InnoBAdora+, la Comunidad de Incubación para iniciativas socioeconómicas de la Economía Social y Solidaria.
Entrevistamos a Lores López, Coordinación, y Anna Pérez, Gestión de Proyectos, del proyecto Dones Mentores, el innovador programa de mentoría social con perspectiva de género exincubado en la InnoBAdora+.
¿Qué es Dones Mentores?
Lores López (LL): Dones Mentores es una iniciativa de mentoría con perspectiva de género. Trabajamos en el marco del abordaje de las violencias machistas y aplicamos mentoría en los procesos de salida y de restitución social respecto a las violencias machistas.
¿Y qué trayectoria tenéis con la InnoBAdora+, la comunidad de incubación para iniciativas socioeconómicas de la economía social y solidaria (ESS) de Barcelona Activa?
LL: Dones Mentores era un proyecto individual. Era, y estaba bastante sola. Una de las cooperativas incubadas me comentó que la misión, visión y valores de Dones Mentores encajaba mucho en la InnoBAdora+ y me animó a presentar la iniciativa. Entramos en medio de la pandemia. Fue muy difícil al principio tener sinergias con otras entidades y conocernos porque fue una entrada más bien virtual. Pero ha sido una experiencia fundamental y positiva para el proyecto.
Anna Pérez (AP): Después entré yo, a finales del 2021. Cogí más la interacción con todo el espacio para crear sinergias con otros espacios, con otras incubadas, con el espacio de coordinación, y vehiculaba todo el apoyo que nos daban desde allí.
¿Qué servicios os atrajeron de esta incubadora?
LL: A nivel de servicios, el espacio. Estaba muy cerca, era muy diáfano. Tenía acceso a salas individualizadas para hacer entrevistas a mentoras y sesiones de capacitación. Además, al principio, me acompañaron mucho y eso me sirvió sobre todo en el diseño y la trazabilidad del proyecto. Yo iba haciendo mucho, pero he trabajado siempre de manera muy instintiva, poco organizada. El hecho de entrar en la InnoBAdora+ me dio una estructura.
Y, después, algo que quizás es difícil de entender, pero a mí se me había dicho muchas veces que parecía un proyecto muy innovador. El hecho de estar dentro de la comunidad de incubación consolidó una idea que yo no me acababa de creer. Fue un espejo.
AP: También hemos tenido apoyo en cuanto a dudas y cualquier información que necesitábamos. Teníamos a Facto Cooperativa como gestora, siempre dispuestos a resolver cualquier duda o cuestión. Y ahora también; nos han encontrado, antes de desincubar y en cosa de un mes, este espacio donde estamos actualmente incubadas (Lidera, de Barcelona Activa).
Así pues, incluso después de iros, ¿seguís formando parte del espacio de alguna manera?
AP: Sí, se mantiene esa relación todavía. La InnoBAdora+ fomenta bastante eso que llaman la comunidad extensa: que las empresas, las organizaciones o las entidades continúen con el vínculo, que sigan manteniendo y haciendo acciones conjuntas.
LL: Nosotras hemos venido, hemos necesitado, nos han incubado. Y, del mismo modo, hacen esa propuesta de mantener el vínculo que pienso que es interesante. Es una de las cosas que más se entienden de la economía social y solidaria: ese funcionamiento diferente, esa forma mirar a la sociedad de manera diferente.
¿Qué otras actividades y servicios destacaríais?
LL: Creo que las reuniones mensuales con las iniciativas. A mí me ayudaron a construir una idea. Y ver que, con independencia de la propuesta o del campo en el que tú estás actuando, muchas de las dificultades son muy comunes. En el proceso de emprendimiento hay mucha soledad e incomprensión.
AP: Ves que los problemas son los mismos. Las sesiones han servido mucho; aparte de para hacer contactos y amistades incluso, para compartir problemáticas y para encontrar herramientas para combatir miedos.
Una de las cosas que también ofrece la comunidad de incubación es el retorno de cada iniciativa a la comunidad de incubación. ¿Cómo valoráis este intercambio?
LL: Nosotras trabajamos por la igualdad, desde esta corrección de desigualdad extrema que es la violencia machista. Por lo tanto, si te ofrecen y te organizan la posibilidad de hacer cosas diferentes que ya quieres hacer, es muy interesante.
¿Qué le diríais a una entidad que entra o quiere entrar en la InnoBAdora+?
LL: Que se tiene que entrar sin complejos, sin la tendencia de esconder algunas miserias. Se tiene que entrar muy abierta y de manera muy sincera y muy franca. Y, aparte de eso, aprovechar al máximo todos los recursos que te da. Entrar sin miedo, explicar tus carencias, o cuáles crees que son tus carencias y, en todo caso, hacer un poco de escucha activa.
AP: Como el emprendimiento es tan duro, hacer un espacio y unirse a otra gente que está como tú, te da apoyo y acceso a información, asesoramiento.
Para terminar, ¿cómo es marcharse al acabar los tres años de incubación?
LL: Todas las iniciativas seguramente no, pero nosotras necesitábamos seguridad, tener un marco o estructura que diera una sensación de seguridad. El hecho de dejar la InnoBAdora+ lo pensamos muchísimo, muchísimo… Es como dejar la casa de tus padres. A veces, tienes invisibilizado el acompañamiento que te hacen en el día a día. Pero ese acompañamiento y esa estructura existen, porque, cuando sales, lo notas. Y deja huella en nuestra forma de trabajo.