Esta fase no comporta cortes de suministro a las personas, pero sí varias acciones para reducir la cantidad de agua utilizada por la ciudadanía, las empresas y también por los ayuntamientos de todo el país. Se complementa con varias acciones de sensibilización y comunicación a la ciudadanía con el fin de conseguir un ahorro mayor de agua.
A efectos prácticos, gracias a la tarea previa hecha en la ciudad entre instituciones y ciudadanía, la nueva fase no implica ninguna afectación en el abastecimiento domiciliario y la limitación más importante que se suma a las establecidas en la fase anterior de excepcionalidad se verá en los campos deportivos de práctica federada, que tienen que disminuir el riego de 450m3/ha/mes a 200 m3/ha/mes.
En Barcelona, el grupo de trabajo sobre sequía impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona con la participación de todas las administraciones y operadores implicados ya se ha reunido para analizar esta situación de preemergencia y las medidas que tendrá que tomar la ciudad en caso de que las restricciones aumenten en las próximas semanas.
En la página web de la sequía en Barcelona encontrarás todos los detalles de la nueva fase y consejos para ahorrar agua en casa.