La ordenanza de convivencia de Barcelona pretende preservar el espacio público como un lugar de convivencia y civismo, donde todas las personas puedan desarrollar en libertad las actividades de libre circulación, de ocio, de encuentro y de recreo, con pleno respeto a la dignidad y los derechos de los demás y a la pluralidad de expresiones y de formas de vida diversas que hay en Barcelona.
Los procesos participativos son una serie de encuentros delimitados en un tiempo concreto para promover el debate y el contraste de argumentos entre la ciudadanía, o entre la ciudadanía y las personas responsables municipales.
Las propuestas recogidas durante el proceso se valorarán técnicamente y cada una tendrá respuesta, con una explicación argumentada de la valoración que se ha hecho.
En la sesión intervendrá Albert Batlle, teniente de alcaldía del Área de Prevención, Seguridad, Convivencia y Régimen Interior, y la presentación de resultados será a cargo de Montse Surroca, comisionada de Convivencia.