Gràcia revitaliza el entorno del Mercado de la Abaceria con un mural en la valla de la obra

09/12/2024 - 15:31

La ilustración, que se puede ver en la fachada de la calle de Puigmartí, representa elementos de la cultura popular y la aportación del mercado al barrio.

La valla que rodea las obras del Mercado de la Abaceria, en la Vila de Gràcia, luce desde este lunes una nueva intervención artística. Se trata de un mural, a cargo de la ilustradora Amaia Arrazola, que contribuirá a dignificar y revitalizar la zona.

La obra refleja diferentes muestras de la arquitectura, la tradición y la cultura popular de Gràcia, representa escenas cotidianas del mercado y quiere transmitir el vínculo de la Abaceria con la vida del barrio como espacio de socialización y como punto de aprovisionamiento de productos sostenibles, de calidad y de proximidad.

Con esta intervención, el Distrito de Gràcia y el Instituto Municipal de Mercados de Barcelona (IMMB) quieren embellecer y hacer más amable el entorno durante las obras, de cara al futuro retorno al emplazamiento original del mercado, que ocupa un espacio provisional en el paseo de Sant Joan durante la construcción del nuevo equipamiento.

El mural tiene 86 metros de largo y se puede ver en la fachada de la calle de Puigmartí, donde la ilustradora y un equipo de grafiteros lo han dibujado este fin de semana. Pronto se podrá ver también en la fachada que da a Travessera de Gràcia, impreso en lona.

Arrazola, que es vecina de la Villa de Gràcia, ha plasmado en la obra elementos icónicos del barrio, como la Torre del Reloj, y ha dividido el mural en cuatro partes, una por cada estación del año, donde muestra diferentes expresiones de la cultura popular y también los productos de temporada que ofrece el mercado.

Así, en verano observamos sandías y los adornos de la Fiesta Mayor; en el otoño, manzanas, coliflores y la castañada, en invierno hay naranjas y elementos navideños como el tió, pero también Sant Medir, los foguerons y el carnaval; y en primavera, fresas y la fiesta de Sant Jordi. El mural representa, además, figuras de diferentes edades y géneros, para simbolizar un barrio diverso.