El Foro Español para la Prevención y la Seguridad Urbana (FEPSU), asociación de la que el Ayuntamiento de Barcelona es miembro, ha analizado hoy el abordaje de las violencias machistas por parte de las policías locales, que tienen un papel estratégico no solo en el asesoramiento a las víctimas y la recogida de denuncias, sino también en la prevención y la detección de este tipo de violencia. Además, son un actor de interconexión con otros servicios municipales que las víctimas puedan necesitar y son el cuerpo policial más próximo al ciudadano.
Por eso, con el título “Atención policial de la violencia machista. Experiencias locales”, el FEPSU ha abierto un espacio de debate y conocimiento mutuo entre policías, investigadores e investigadoras, académicos y académicas y otros profesionales implicados en la atención a las víctimas de violencias machistas.
El seminario ha abordado cuestiones clave como la evaluación del riesgo, la declaración policial y la resiliencia de los mismos agentes, además de algunos modelos y experiencias policiales de éxito puestos en marcha en el ámbito local.
Es el caso del Plan estratégico de la Guardia Urbana de Barcelona para prevenir y detectar la violencia machista, que ha sido presentado por la subinspectora de la Guardia Urbana, Gemma Alfonso. El plan se centra en un servicio específico para prevenir y detectar situaciones de riesgo, mejorar la atención a las mujeres y los niños y niñas y reforzar la coordinación con el resto de servicios. El objetivo es combatir la invisibilidad de este problema, que se traduce en un dato: un 77 % de las mujeres muertas por violencias machistas en el 2021 no habían denunciado nunca a su agresor.
En los últimos años, la Guardia Urbana también ha puesto en marcha varias acciones para mejorar la protección y la atención a las mujeres que sufren situaciones de violencias machistas, como la Guía de indicadores de alerta, para detectar y actuar ante un posible caso, o la creación de un agente referente en violencias machistas en cada distrito, que se coordina e intercambia información con el Grupo de Atención a la Víctima de los Mossos d’Esquadra. Además, en abril del 2023 entrará en funcionamiento el Servicio de Atención a la Víctima (SAV) de la Guardia Urbana, que se ubicará en La Rambla, 23, en Ciutat Vella.
También han participado miembros de la Policía Municipal de Madrid, la Policía Local de Santa Coloma de Gramenet y la Policía Municipal de Terrassa, así como profesionales del Instituto de Seguridad Pública de Cataluña (ISPC), la Universidad de Barcelona y representantes de los ayuntamientos de Terrassa y Dènia. En la bienvenida del acto ha participado la delegada del FEPSU y directora de los Servicios de Prevención del Ayuntamiento de Barcelona, Àngels Vila.