El programa “La Guardia Urbana en la escuela” es una propuesta didáctica que se ofrece en todas las escuelas de la ciudad para trabajar con niños y adolescentes de todos los ciclos educativos aspectos relacionados con el conocimiento, la vinculación y el cuidado del entorno próximo, la mejora de la convivencia y de las relaciones interpersonales y la prevención de las conductas de riesgo en los ámbitos de la conducción y la movilidad segura, la violencia de género y el consumo de drogas.
Los niños o jóvenes que a causa de una enfermedad requieren una hospitalización y no pueden seguir temporalmente los estudios en su centro educativo pueden recibir atención educativa en las aulas hospitalarias, donde se les ofrecen actividades específicas adaptadas a su estado clínico y al tiempo de estancia.
En este sentido, el Servicio de Educación para la Seguridad (SES) de la Guardia Urbana colabora, a través del programa «La Guardia Urbana en la escuela», con el equipo docente de estos centros desde hace más de dos años, concretamente, con la Escuela Infantil del Hospital de Santa Creu i Sant Pau, con el Aula Hospitalaria del Clínic y, desde este curso, con el Aula Hospitalaria Vall d’Hebron.
Fruto de esta última colaboración, esta mañana la Unidad Montada del cuerpo ha ofrecido dos talleres virtuales de treinta minutos de duración. El objetivo ha sido crear un ambiente participativo para estimular a los niños y niñas hospitalizados y:
- Presentar la figura del guardia urbano como un agente de proximidad.
- Dar a conocer las tareas y las funciones de los agentes de la Unidad Montada.
- Explicar la importancia de la tenencia responsable de los animales y de su bienestar.
- Fomentar el respeto y el compromiso como valores básicos para la convivencia.
Guardias del equipo del SES se han desplazado a las caballerizas de la Unidad Montada, situadas en la calle de Wellington, desde donde se ha hecho la conexión en línea con el hospital, y dos agentes de la Unidad Montada, uno de ellos con el uniforme de gala para dotar la actividad mayor atractivo, han impartido las explicaciones desde diferentes puntos.
Los alumnos han podido recorrer las cuadras de los caballos estabulados, el picadero y el resto de instalaciones, han conocido a todos los caballos y han visto los cuidados que necesitan: utensilios de limpieza, herraduras, comida, etc.
Arlet, Noa, Araf, Pol y Ayoub, de entre 8 y 10 años, han participado en el taller de primaria; y Marwa, Marina, Mar, Ramón y Bruno, de entre 13 y 16 años, en el de secundaria.