Reflexiones sobre la colaboración pública y privada en el despliegue de las nuevas redes de conectividad
El despliegue de las redes de telecomunicaciones, como el 5G, requiere una colaboración estrecha entre administraciones públicas y empresas para optimizar las infraestructuras y mejorar la conectividad en espacios con alta concentración de personas, como estadios, centros comerciales y áreas urbanas durante eventos masivos.
Expertos en telecomunicaciones, entre los que se encontraba Paco Rodríguez, en representación del IMI, han participado recientemente en un coloquio sobre los retos y oportunidades del despliegue de las nuevas redes de telecomunicaciones, como el 5G, en una jornada organizada por el diario Expansión y la empresa Cellnex, centrada en la colaboración entre administraciones públicas y empresas privadas y la mejora de la conectividad en zonas de gran afluencia.
En esta se ha detectado la necesidad de una gestión coordinada para racionalizar las infraestructuras y facilitar la instalación de sistemas como los sistemas distribuidos de antenas (DAS) y las small cells, para garantizar un mejor servicio en eventos deportivos, conciertos y otros actos multitudinarios.
En este contexto, el uso de activos urbanos como marquesinas y soportes publicitarios se presenta como una oportunidad para instalar equipos de telecomunicaciones de manera eficiente. La normativa europea obliga a facilitar este acceso mediante mecanismos regulados que aseguren un equilibrio entre los intereses públicos y privados.
Los expertos destacan que el futuro de la conectividad pasa por crear un ecosistema colaborativo en el que los operadores puedan compartir infraestructuras para ofrecer un servicio de calidad. Este modelo también implica establecer marcos normativos claros para agilizar la tramitación administrativa y fomentar inversiones sostenibles.
Desde el IMI, se trabaja para sentar las bases de esta colaboración y consolidar un modelo que ponga a la ciudad de Barcelona a la vanguardia de las soluciones tecnológicas más innovadoras y sostenibles.
El IMI juega un papel clave en la definición de las estrategias municipales para la gestión de infraestructuras de telecomunicaciones. Esto incluye facilitar el acceso a los activos urbanos disponibles, como marquesinas y soportes publicitarios, de acuerdo con la normativa europea, y asegurar que estos recursos se gestionen de manera transparente y eficiente para beneficiar tanto a los operadores como a la ciudadanía. La implementación de estos sistemas no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también genera nuevas oportunidades de negocio y desarrollo tecnológico.
Finalmente, se concluye que superar los desafíos burocráticos y fomentar un diálogo activo entre los diferentes actores del sector es esencial para garantizar una experiencia de conectividad óptima para la ciudadanía.
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