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La contribución del IMU para un mundo más 'verde' también se mueve sobre ruedas

Un IMU más sostenible, incluso sobre ruedas

El Institut Municipal d’Urbanisme cuenta desde finales de 2022 con dos vehículos nuevos de  la marca francesa Citroën. Se trata del modelo AMI, totalmente eléctrico y con unas dimensiones muy reducidas que lo convierten en un coche muy práctico. Estos vehículos tienen la circulación restringida a zonas urbanas o zonas en donde la velocidad máxima no supere los 50 km/h. En este caso serán de uso exclusivo para algunas tareas del personal del IMU; como por ejemplo, las visitas a obras por parte de los técnicos o desplazamientos con finalidades profesionales justificadas dentro del catálogo de tareas  que tiene asumidas este ente municipal.

Pronto hará dos años desde que el IMU se trasladó a su nueva sede, en la calle Bolívia, 250 (barrio de Provençals del Poblenou) con un objetivo muy claro: empezar una nueva etapa caracterizada por una nueva filosofía de trabajo, a la vez que ponía en valor las características de un edificio moderno, ecológicamente hablando, e integrar sus beneficios en el día a día de las tareas que se desarrollan.

Ahora, y continuando con esta filosofía de eficiencia y sostenibilidad con el entorno más inmediato, el Institut Municipal d’Urbanisme, ha apostado por una movilidad de impacto menos contaminante (cero emisiones) adquiriendo dos nuevos vehículos totalmente eléctricos: se trata del modelo AMI, de la firma francesa Citroën.

Es un vehículo muy práctico y la simplicidad es la característica más importante cuando hablamos de su estética, puesto que tiene unas medidas que lo hacen ideal para entornos estrechos y pequeños: 2,41 metros de largo; 1,39 metros de anchura, y 1,52 metros de alto. (Para tener una idea, es la mitad de una plaza de aparcamiento convencional de una Área Verde o Azul de nuestra ciudad).

Además, este modelo tiene un bastidor único, y una estructura liviana y muy compacta (hecho a base de paneles sobre una estructura resistente metálica que sirve para proteger a los ocupantes) que integra el conjunto de sus baterías entre los dos ejes.

Otras características que hacen este Citroën especial es que tiene mucha superficie acristalada, creando una visión muy panorámica; tiene capacidad para dos plazas, pero en cambio ni siquiera tiene maletero ni se abre la puerta posterior; además, no necesita carné de coche para conducirlo; tan solo se necesita la licencia ‘AM’ para poder circular con él si se tiene más de 15 años de edad. Esto significa que tiene la circulación restringida en zonas urbanas o en aquellas en que la velocidad máxima no supere los 50 km/h.

El AMI, pensado para desplazamientos de corta distancia, tiene una autonomía eléctrica estimada de 75 kilómetros y para la recarga tiene una toma Schuko, un enchufe doméstico que permite recuperar el total de la batería en 3 horas.

Poco lujo y precio asequible

Este modelo prescinde de cualquier tipo de lujo y se centra en los aspectos básicos; así, todas las superficies están fabricadas en plástico, incluyendo los asientos. Tampoco tiene ventanas convencionales, ni equipo de radio ni aire acondicionado. Tan solo tiene un indicador donde se pueden ver datos básicos de la conducción, como velocidad y autonomía.

De hecho, el AMI no puede estar catalogado como coche, pero sí como quadriciclo ligero. En este sentido, y si lo comparamos con otras marcas de la competencia (Aixam, Ligier o Renault Twizy) que también presentan un concepto ultracompacto similar, el precio de venta al público es bastante asequible (a partir de los 8.000 euros y 9.000 euros según el modelo), y con la peculiaridad de poderlo adquirir por Internet.

Los dos vehículos serán de uso exclusivo para algunas tareas profesionales del personal del IMU, como por ejemplo, las visitas a obras por parte de los técnicos o desplazamientos con fines profesionales dentro del catálogo de tareas que tiene asumidas este ente municipal.