El Plan de Adolescencia y Juventud 2017-2021, presentado en Plenario el 30 de junio de 2017, constituye el instrumento fundamental de actuación del Ayuntamiento de Barcelona que garantiza los derechos de las personas jóvenes.
Este Plan sitúa al adolescente y al joven en el centro, protagonista de su vida como agente de transformación social.
Con esta responsabilidad de construir las políticas de juventud, el nuevo Plan parte de un largo proceso de elaboración que comienza en abril de 2016, donde se han creado diferentes procesos y espacios participativos.
Al mismo tiempo, este documento también recoge la historia de la ciudad de Barcelona con relación a los planes de juventud desde el año 1985, así como la relación de planes que interactúan con el nuevo Plan de Adolescencia y Juventud.
Un Plan innovador y estimulante que ha contado con la participación directa de jóvenes y que ha recogido sus aportaciones, al tiempo que ha trabajado con las diferentes áreas y los estamentos implicados para impulsar y corresponsabilizar las 182 medidas recogidas en el Plan.
En el Plan también se recoge un calendario de las diferentes medidas, las principales acciones, los proyectos, los referentes de las medidas, así como un sistema de indicadores de evaluación que permitirá analizar cuál es el grado de consecución de los diferentes objetivos de trabajo.
En marzo de 2021, el Plan se ha actualizado a las nuevas necesidades derivadas de la crisis de la COVID-19, con la nueva medida de gobierno "La juventud en la cabeza" 2021-2022.
El documento recoge 45 propuestas que se agrupan en seis ámbitos de trabajo: educación, empleo, asociacionismo y participación, bienestar, vivienda, y equipamientos y servicios juveniles. Estas nuevas acciones se añaden a las más de 180 que ya recoge el PAJ.
Misión y principios del Plan de Adolescencia y Juventud
El Plan de Adolescencia y Juventud 2017-2021 tiene como misión fomentar un principio universal para los adolescentes y los jóvenes: la autonomía.
Este concepto se refiere a su capacidad para desarrollarse en libertad y con disponibilidad de los recursos necesarios de manera igualitaria, teniendo también en cuenta las necesidades de su entorno. Así pues, se propone un plan que tenga como eje central el logro de la libertad individual y de la responsabilidad para con el colectivo.
Esta misión se desarrolla en una estructura de cuatro grandes principios rectores de actuación, que recogen los objetivos principales de las políticas de juventud:
Promoción de la emancipación juvenil
Todas las personas deben poder tener acceso a una vida con autonomía y una trayectoria educativa y laboral completa.
- Una ciudad en la que mejoren los porcentaje de jóvenes que tienen estudios secundarios obligatorios (ESO) y postobligatorios.
- Una ciudad que dé facilidades para que los jóvenes puedan combinar el estudio y el trabajo.
- Una ciudad donde se incremente el número de jóvenes que tienen un trabajo estable.
- Una ciudad con una política de vivienda que favorezca la emancipación de los jóvenes a partir de los 18 años.
Protagonistas de la transformación social
Los adolescentes y los jóvenes de Barcelona deben ser actores de la ciudad, con plena libertad para hacer oír su voz y para participar.
- Una ciudad que permita una vida sin barreras, ni físicas ni sociales, para aquellas personas que tienen discapacidades o que son potencialmente objeto de discriminación.
- Una ciudad que celebre la diversidad y que empodere a los jóvenes para superar las barreras invisibles que impongan los prejuicios, promoviendo la igualdad entre todas las personas.
- Un marco de participación que empodere a los jóvenes y les permita compartir espacios de decisión a través del asociacionismo, y que facilite la interlocución y el reconocimiento con las entidades de representación colectiva de los jóvenes.
- Una Barcelona que promueva la producción artística y la expresión cultural de los jóvenes y los adolescentes.
- Una ciudad que promueva las nuevas formas de colaboración, cooperación e intercambio entre iguales.
Concepción integral del bienestar
Tener cuidado de los jóvenes significa tener en cuenta la salud desde un punto de vista global, integral y relacional.
- Una ciudad comprometida con la mejora del bienestar de la población joven, a través de la promoción de la salud, el deporte y el bienestar emocional.
- La ciudad como lugar sostenible, donde la movilidad, la gestión de los recursos y sus usos respondan a criterios ambientales y de durabilidad.
- Una ciudad con espacios de ocio para la juventud, autogestionados y con continuidad, a fin de hacer del ocio un espacio de relación con diversidad de opciones.
Un territorio accesible y sostenible
La ciudad debe ser un lugar para todos, accesible, sin exclusiones por razón de edad.
La ciudad es el territorio con toda una suma de recursos y de espacios para compartir entre las personas jóvenes.
- La transversalidad y la coordinación territorial de los planes de juventud como herramienta para incrementar la aproximación a las necesidades y los retos de la población joven de la ciudad.
- El espacio público como un lugar para que adolescentes y jóvenes vivan la ciudad con plena libertad.
- Las políticas de juventud desarrolladas a través de la red de recursos y equipamientos del territorio obedeciendo al principio de proximidad en todas las actuaciones.
- La ciudad como lugar sostenible, donde la movilidad, la gestión de los recursos y sus usos respondan a criterios ambientales y de durabilidad.