Con motivo de la exposición Escrito en el agua, pensamiento y palabra quieren darse de la mano dejando abiertas las puertas de la misma para experimentar otros modos de exploración.

Para ello, Èlia Llach ha invitado a dos personas que de alguna manera siempre la han acompañado. Por una parte, a Miguel Morey, con quien Èlia se estrelló contra el pensamiento, y por otra, a Ester Pino, con quien Èlia se estrelló contra la palabra. 

Mientras tanto, el apuntador de la exposición sigue preguntando: ¿qué vienes a buscar? ¿Qué te falta?

MIGUEL MOREY, barcelonés (1950), antiguo colaborador de El Viejo Topo y miembro del Colegio de Filosofía, ha sido catedrático de Filosofía de la Universidad de Barcelona durante más de treinta años. Ha publicado varios textos sobre Michel Foucault, de quien fue uno de los introductores en España; la recopilación de prosas Pequeñas doctrinas de la soledad (2007) y, más recientemente, Vidas de Nietzsche (2018) y Monólogos de la bella durmiente: sobre María Zambrano (2021).  Es autor de la trilogía de prosa de ensayo: Camino de Santiago (1987), Deseo de ser piel roja (XXII premio Anagrama de Ensayo, 1994) y Hotel Finisterre (2011). Esta trilogía está prefigurada en El orden de los acontecimientos: sobre el saber narrativo (1988), cuya reedición prepara en la actualidad.