Un nuevo protocolo coordinará la actuación del Centro LGTBI, la Oficina para la No Discriminación (OND) del Ayuntamiento y el OCH
El Centro LGTBI, la Oficina para la No Discriminación (OND) del Ayuntamiento y el Observatorio contra la Homofobia (OCH) refuerzan su coordinación con un nuevo protocolo que permitirá mejorar la actuación para hacer frente a las situaciones de discriminación y LGTBI-fobias. El mecanismo estará abierto a la incorporación de otras entidades que trabajen en la detección, atención y acompañamiento a personas que han sufrido LGTBI-fobia.
El objetivo es coordinar a los diferentes actores y circuitos de la ciudad, tanto públicos como privados, para hacer frente a la discriminación y a las situaciones de LGTBI-fobia. El documento detalla el circuito que hay que seguir para abordar las situaciones detectadas de discriminación o vulneración de derechos por orientación sexual, identidad de género o expresión de género entre los servicios municipales y las entidades activas en la detección, atención y acompañamiento relativos a estas vulneraciones de derechos, como el Observatorio contra la Homofobia (OCH). Se pretende articular así la atención, el acompañamiento, el análisis y el asesoramiento necesarios para que la persona que sufre o haya sufrido situaciones de discriminación y agresiones LGTBI-fóbicas en Barcelona pueda superar los casos de abuso o violencia y reparar el daño y las consecuencias personales, laborales, familiares y sociales que haya tenido, potenciando el trabajo en red, la coordinación y las sinergias entre distintos servicios y entidades sociales.
Circuitos y procedimientos de actuación
La Oficina para la No Discriminación (OND) es el servicio municipal referente en cuanto a situaciones de discriminación, incluidas las LGTBI-fóbicas, en colaboración con otros servicios y con entidades de la sociedad civil implicadas. Ofrece asesoramiento jurídico, acompañamiento socioeducativo y, en caso necesario, mediación. Con este nuevo protocolo, la Oficina se configura como la responsable del registro de información y de la comunicación con otras instituciones y administraciones.
Por su parte, el Centro LGTBI constituye una importante vía de detección y derivación. En los casos de LGTBI-fobia, ofrece acompañamiento y apoyo psicosocial de forma complementaria a la atención jurídica, socioeducativa o de mediación que proporciona la OND, con el objetivo de poder ofrecer una atención jurídica especializada en este ámbito.
Con respecto a las entidades, llevan a cabo una tarea fundamental no solo de incidencia y sensibilización sino también de atención y acompañamiento a las personas que sufren situaciones de discriminación. El Observatorio contra la Homofobia, en particular, es la entidad social especializada en el tratamiento de la discriminación y la LGTBI-fobia. Ofrece acompañamiento y apoyo psicosocial, representación letrada e incidencia pública.
El protocolo establece la creación de una mesa de coordinación formada, en principio, por la Oficina para la No Discriminación, el Centro LGTBI y el Observatorio contra la Homofobia, que estará abierta a otras entidades implicadas en la detección y el seguimiento de casos de LGTBI-fobia. Desde este espacio se trabajará para facilitar todos los mecanismos para desarrollar las acciones que aporten a la persona la necesaria restauración, poniendo sus necesidades como eje central de la intervención.
Procedimientos de actuación previstos por el protocolo
Ante la detección o conocimiento de un caso de agresión por parte de alguno de los servicios municipales o de alguna entidad, se activarán los siguientes procedimientos:
- En caso de ser una situación de riesgo alto o una situación urgente, se movilizarán los recursos de urgencia necesarios, sobre todo los sanitarios, en un primer momento. También pueden requerirse otros recursos como los de seguridad (Guardia Urbana y Mossos d’Esquadra) o los sociales (CUESB).
- Una vez activados los servicios de urgencia, en caso necesario y siempre de acuerdo con la voluntad y el deseo de la persona afectada, se hará una valoración del actor del protocolo al que hay que movilizar según la situación concreta y las necesidades que se tengan.