11 de mayo de 2023
Memoria democrática. En total se colocarán en la ciudad doce nuevos adoquines de memoria en el marco de la segunda edición del proyecto pedagógico Stolpersteine Barcelona, desarrollado por el alumnado de nueve centros educativos de la ciudad.
En total se colocarán en la ciudad doce nuevos adoquines de memoria en el marco de la segunda edición del proyecto pedagógico Stolpersteine Barcelona, desarrollado por el alumnado de diversos centros educativos de la ciudad.
La iniciativa se emprendió en la ciudad el año pasado, en una experiencia piloto en qué tomaron parte tres institutos, y este año se consolida con la participación de nueve centros educativos.
El alumnado, principalmente de secundaria y bachillerato, será el encargado de colocar los adoquines de memoria, como culminación del proceso de aprendizaje que han hecho durante todo el curso académico. En colaboración con las amicales y las familias de las personas deportadas en los campos de concentración nazis, han estudiado y analizado los hechos históricos con una perspectiva transversal, y han desarrollado biografías de las víctimas que vivieron en la ciudad.
Cada adoquín lleva el nombre de la persona, la fecha de nacimiento, de exilio, de deportación, e indica si murió o si sobrevivió.
Stolpersteine en Sarrià – Sant Gervasi
De las doce piedras de memoria que se colocarán este año, dos serán en el distrito, en los lugares donde las personas homenajeadas vivieron en algún momento de sus vidas.
Por una parte, la que se dedica a Carlos Grey Molay, que es la primera persona afrodescendiente del Estado español que contará con una Stolperstein. Nació el 4 de julio de 1913 a Fernando Poo, entonces colonia española (actualmente Bioko, en Guinea Ecuatorial). Fue un combatiente republicano notable que estuvo recluido y sobrevivió al campo de Mauthausen.
Aunque de orígenes humildes, pudo estudiar e ir a la Universidad de Barcelona, donde cursó medicina. El estallido de la guerra hizo que se uniera a las tropas que combatían contra los sublevados. Después de la derrota pasó a Francia, donde participó en la guerra contra Alemania. Detenido, fue enviado a Mauthausen en 1941 con la matrícula 5124. Después de la liberación volvió a Francia, donde permanecería el resto de su vida. Murió en 1982.
La colocación del adoquín en memoria de Carlos Grey Molay tendrá lugar en la calle de Atenas, 3, el jueves, 18 de mayo, a las 10.00 h. Lo hará el alumnado del CFA Montserrat Roig, del distrito de Sant Martí.
Por otra parte, se rinde homenaje a Llorenç Vitrià Barrera. Nació en Barcelona el 2 de febrero de 1908. Aficionado al boxeo, entrenaba en el Sporting Boxing Club de Barcelona. En 1924 formó parte del equipo español en las Olimpíadas celebradas en París. En 1935 se retiró definitivamente del boxeo y abrió una tienda de fajas ortopédicas.
Ante la llegada de las tropas franquistas a Barcelona, se vio obligado a exiliarse en Francia por su condición de republicano. Se marchó hacia Perpiñán, más tarde fue a Ruelle y, posteriormente, fue internado en el campo de refugiados de Les Alliers (Angulema).
El 20 de agosto de 1940, salió de Angulema el primer convoy desde Francia con personas civiles hacia un campo nazi. Era el convoy conocido como el Convoy de los 927 o Convoy de Angulema. Entre los prisioneros estaba Llorenç Vitrià. El 24 de agosto llegó a Mauthausen, donde le adjudicaron la matrícula 4074. A pesar de ser un atleta, la dureza del trabajo, los maltratos, los abusos, el frío y el hambre tuvieron impacto en su cuerpo y en su ánimo. El 24 de enero de 1941 fue trasladado a Gusen con la matrícula 9785, donde murió el 18 de junio de 1941.
La Stolpersteine en memoria de Llorenç Vitrià Barrera se colocará en el pasaje de Marimon, 18, después del verano, ya que se están haciendo trabajos de reurbanización. El alumnado del INS Menéndez y Pelayo será el encargado.
Un proyecto de memoria a escala local e internacional
Les Stolpersteine son una propuesta del artista alemán Günter Denmig, surgida en los años noventa en el marco de la reunificación alemana, que aporta un enfoque micro al hecho memorial, en contraposición con los grandes complejos memoriales característicos de buena parte de Europa. En la actualidad, hay más de 70.000 adoquines de memoria en una veintena de países.
El proyecto pedagógico Stolpersteine Barcelona forma parte de la Convocatoria Unificada de Programas Educativos del Consorcio de Educación, y por lo tanto, los institutos lo pueden solicitar trabajarlo a partir del próximo curso. Es una iniciativa impulsada por la Concejalía de memoria Democrática de l’Ajuntament de Barcelona y los Amistosos de Mauthausen y Ravensbrück.