31 de mayo de 2022
Estudiantes del Instituto Francisco de Goya han colocado una ‘stolpersteine’ en honor de la víctima del nazismo ante su domicilio, en el número 324 de la calle de Nàpols.
Estudiantes del Instituto Francisco de Goya han colocado una ‘stolpersteine’ en honor de la víctima del nazismo ante su domicilio, en el número 324 de la calle de Nàpols.
Un adoquín dorado ante el número 324 de la calle de Nápoles recuerda desde este 31 de mayo la historia de un antiguo vecino de la finca, el graciense Lluís Villar, que fue deportado por el régimen nazi durante la Segunda Guerra Mundial y murió en el campo de concentración de Gusen (Austria) en el año 1941.
Este ‘adoquín de la memoria’ forma parte del proyecto Stolpersteine Barcelona, impulsado por la Concejalía de memoria Democrática del Ayuntamiento de Barcelona y los Amicales de Mauthausen i Ravensbrück para recordar y homenajear a las víctimas del nazismo de la ciudad.
Las stolpersteine son unos pequeños adoquines de color dorado que se colocan delante del domicilio de las personas deportadas y muestran su nombre, la fecha de nacimiento, de exilio y de deportación y una breve explicación sobre si murieron o sobrevivieron. El artista alemán Günter Denmig ideó en los años 90 estos micromonumentos, que actualmente están presentes en una veintena de países, donde se han colocado más de 70.000.
Hoy, estudiantes del Instituto Francisco de Goya (situado en el distrito de Horta-Guinardó) han participado en la colocación del adoquín en honor del vecino graciense, en un acto donde también han estado presentes la alcaldesa, Ada Colau, y diversos familiares de Villar.
El proyecto Stolpersteine Barcelona
La iniciativa Stolpersteine Barcelona es una prueba piloto en la cual tres institutos de la ciudad han trabajado para recuperar las biografías de nueve personas deportadas y han estudiado el contexto social e histórico que favoreció el ascenso del nazismo.
Los centros participantes en esta primera edición han sido el mencionado Francisco de Goya y los institutos Quatre Cantons (Sant Martí) y XXV Olimpiada (Sants-Montjuïc), que han trabajado acompañados por los dos amicales y el Ayuntamiento de Barcelona.
Las nueve biografías trabajadas este curso corresponden a Lluís Villar, Florián Ibáñez, Josep Fort Maluenda, Carme Buatell, Francesc Boix, José Alcubierre, Sabatia Morand, Ferran Masip y Vicenç Vidrier.
Durante el curso 2022-2023, el proyecto Stolpersteine Barcelona se ampliará para llegar a cinco centros más de la ciudad.
Lluís Villar
Nació en Barcelona el 6 de junio de 1900. Cuando se produjo el golpe fascista contra el gobierno de la República, se alistó voluntario y fue destinado al cuerpo de intendencia, donde se dedicó al transporte por carretera entre Barcelona y Valencia. La evolución de la guerra lo forzó a marcharse hacia el exilio en Francia, donde permaneció un tiempo en el campo de refugiados de Argelers y se alistó en la Compañía de Trabajadores Extranjeros.
Más tarde, a raíz de la invasión de Francia, fue detenido por los nazis y trasladado al campo de prisioneros Stalag VIII C de Zagan (Polonia) y posteriormente al campo de concentración XII D de Trier (Alemania). El 25 de enero de 1941 lo llevaron al campo de Mauthausen (Austria), donde le correspondió el número de matrícula 4.087. Dos meses y medio más tarde lo trasladaron al campo vecino de Gusen, con la matrícula 11.932, donde resistió hasta el 7 de diciembre, cuando se registró su muerte.
