Desde sus orígenes, en la Edad Media, los Encants han recorrido gran parte de la geografía barcelonesa. En el 2013 finalizó la construcción de las nuevas instalaciones, situadas muy cerca de su emplazamiento anterior.
La primera noticia que se tiene de los Encants es el mercado medieval que se celebraba al lado de las murallas, en el camino del Rec, a mediados del siglo XIV. En el siglo XVI se trasladó a la plaza Nova y, un siglo más tarde, lo encontramos en la plaza de Sant Jaume. En el siglo XVIII se situaba delante de la Lonja y a finales del siglo XIX y principios del XX, en la avenida de Mistral y el paseo de la Creu Coberta.
Finalmente, en 1928, y con motivo de la celebración de la Exposición Internacional de 1929, la feria se trasladó por última vez delante de la plaza de las Glòries. El 23 de marzo de 1928 se desplazó hasta allí el primer vendedor, Josep Font, y ocho días después ya había 15 vendedores. Al cabo de un mes eran 50, y rápidamente se pasó a los 200 vendedores.
En un primer momento, esta mudanza no fue fácil: en la avenida de Mistral y en el paseo de la Creu Coberta se vendía a la gente de paso y, en cambio, en la plaza de las Glòries el cliente tenía que ir allí expresamente.
Arquitectura
El nuevo Mercado de los Encants, diseñado por Fermín Vázquez, se concibe como una plaza abierta que aprovecha los desniveles de las calles que lo rodean para generar unas rampas donde se ubican los puestos.
Las tiendas se sitúan en una serie continua de rampas ligeramente inclinadas que forman un recorrido por todo el edificio, con la idea de ofrecer una experiencia similar a la de pasear por una calle de peatones. El propio panot que cubre el suelo tiene la función de generar una continuidad visual con la calle.
Inauguración: 1928 (2013)
Remodelado
Superficie: 15.000 m²
Ubicación: c. Castillejos, 158