Higos: ¿qué hay que saber sobre estas frutas de verano?
Ya ha comenzado agosto y, con él, llegan los higos. Pero, quizás algunos de vosotros ya habéis tenido la suerte de disfrutar de la breva, una fruta que, aunque tiene un aspecto similar, ofrece un sabor distintivo. ¿Conoces las diferencias?
Pues bien, Mireia de Fruites i Verdures Vidal Pons del Mercat de la Boqueria nos explica que antes de que lleguen los higos, a principios de junio, podemos encontrar las brevas. La principal diferencia entre las brevas y los higos “radica en el momento de maduración y en el tamaño. Las brevas suelen ser más grandes y maduran antes, mientras que los higos son más pequeños y llegan más tarde”.
¿Sabías que existen más de 750 variedades de higos? Estas variedades se dividen principalmente en dos categorías: las comestibles y las ornamentales. De todas ellas, solo unas 300 están cultivadas para el consumo humano.
Los higos son una fuente de beneficios para nuestro cuerpo: ayudan a la digestión y combaten el estreñimiento gracias a su alto contenido en fibra. Además, son ricos en vitaminas A, B y C, y aportan minerales como el potasio, calcio y magnesio, que contribuyen al buen funcionamiento de los intestinos.
Los higos se pueden disfrutar de muchas formas diferentes. Puedes comerlos frescos, secos o integrados en platos dulces y salados. Mireia nos da algunos consejos sobre cómo aprovechar al máximo los higos: "se pueden comer solos, con yogur, en ensaladas o incluso en rellenos." Además, puedes incorporarlos en pasteles o hacer mermelada.
Si decides hacer mermelada, aquí tienes una receta sencilla. Solo necesitas: 1 kg de higos frescos, 500 g de azúcar, el jugo de un limón y, opcionalmente, una rama de canela si deseas darle un toque especial. Comienza lavando bien los higos, quita los tallos y córtalos en cuartos. Colócalos en una olla grande junto con el azúcar y el jugo de limón, y mezcla bien. Deja reposar la mezcla durante una hora para que los higos liberen su jugo natural.
Luego, lleva la olla a fuego medio hasta que la mezcla empiece a hervir, a continuación reduce el fuego y cocina a fuego lento durante unos 40-50 minutos, removiendo de vez en cuando. Si prefieres una textura más suave, tritura la mezcla con una batidora de mano una vez esté cocida.
Finalmente, llena los frascos de vidrio con la mermelada caliente, ciérralos herméticamente y colócalos boca abajo durante unos minutos para crear vacío. Deja enfriar los frascos a temperatura ambiente y guárdalos en un lugar fresco y seco. ¡Se recomienda esperar un día antes de consumirla!
Para conservar los higos en casa, es importante seguir algunos consejos sencillos pero efectivos. Se recomienda guardarlos a temperatura ambiente para preservar su sabor y textura. Si los higos están muy maduros y necesitas conservarlos por más tiempo, colócalos en una bandeja con papel de cocina para absorber la humedad y guárdalos en la nevera dentro de un envase hermético; así se mantendrán frescos hasta una semana.
Otro truco es evitar apilarlos, ya que son delicados y pueden aplastarse fácilmente. Si tienes muchos higos y no puedes consumirlos rápidamente, una buena opción es congelarlos: lávalos, córtalos por la mitad y ¡al congelador!
¡No esperes más y visita los mercados locales para buscar los mejores higos frescos! ¡La temporada es corta, y solo tienes desde principios de agosto hasta finales de septiembre para disfrutarlos!