Limpieza y Residuos

Antes de comprar es importante que pensemos qué alimentos necesitamos y las cantidades o raciones de cada uno de ellos. Hay que tener en cuenta cuántas personas prevemos que comerán en cada comida.

Cuando planificamos el menú semanal es conveniente que revisemos qué productos tenemos en la nevera, en el congelador y en los armarios para consumirlos antes de que caduquen.

La lista de la compra puede ser un elemento indispensable a la hora de ir a comprar. Una lista cerrada donde anotamos las cantidades que necesitamos de cada elemento evitará la tentación de comprar productos que no consumiremos.

El hecho de hacer la lista de la compra nos obliga además a pensar a corto plazo, ya que una previsión de comidas a largo plazo siempre será más difícil de cumplir. Eso también nos permitirá disponer siempre de productos frescos, evitando la compra de todos aquellos productos que no estemos seguros de que consumiremos.

Cuando salgamos a comprar es importante que antes echemos un vistazo a la lista que hemos preparado y, en función de los alimentos que necesitamos, decidamos la ruta. A menudo vamos a comprar con prisas, pero hacer una buena compra necesita su tiempo. El orden en el que compramos los alimentos es importante para asegurar que llegan a casa en buen estado.

A la hora de llenar el carro o las bolsas de la compra también nos tenemos que asegurar de que lo hacemos en el orden correcto. Siempre tenemos que colocar las bebidas y las latas de conservas en el fondo e ir llenando el carro o la bolsa teniendo en cuenta el peso de cada producto. Encima de todo pondremos los alimentos que se estropean si se chafan, como por ejemplo las verduras o los huevos.

Para evitar tirar la comida es muy importante que nos fijemos en las etiquetas. Repasemos siempre la fecha de consumo preferente o de caducidad del producto, así como las condiciones de conservación y almacenaje antes de abrirlo, y el tiempo de duración del producto una vez abierto.

Antes de escoger el producto que queremos comprar tenemos que tener claro si lo podremos consumir antes de lo que marca la fecha de caducidad y si, una vez abierto, lo consumiremos antes de que se estropee. En caso de no tener claras estas dudas, podemos optar por alternativas de un tamaño más pequeño o que vengan agrupadas con menos unidades.