Durante los años ochenta, Barcelona experimentó una gran transformación.

El 2 de diciembre de 1982, Pasqual Maragall fue designado nuevo alcalde de Barcelona en sustitución de Narcís Serra. Su política se basó principalmente en la remodelación de los barrios, la reserva de espacio para destinarlo a equipamientos y zonas verdes, la reestructuración urbana, el establecimiento de nuevas áreas de centralidad y una nueva reorganización morfológica de la ciudad. La designación de Barcelona como sede para la celebración de los Juegos Olímpicos de 1992 supuso el impulso definitivo para modernizar la ciudad. 

El 18 de enero de 1984, el Ayuntamiento de Barcelona aprobó la nueva división municipal de Barcelona en 10 distritos. Nou Barris se convierte en el Distrito 8 y se independiza de Sant Andreu que, a partir de ese momento, se transforma en el Distrito 9. El nuevo distrito de Nou Barris agrupaba los Barrios de Can Peguera (entonces Ramón Albó), Canyelles, Ciutat Meridiana, Guineueta, Porta, Prosperitat, Roquetes, Torre Baró, Torre Llobeta, Trinitat Nova, Turó de la Peira, Vallbona, Verdún y Vilapicina. Trinitat Vella pasa a formar parte del distrito de Sant Andreu. La sede del Distrito se estableció en el barrio de Canyelles y en 1988 se trasladó al antiguo Institut Mental de la Santa Creu, en el  barrio de Guineueta.

Desde 1984 Juanjo Ferreiro fue regidor del Districte de Nou Barris, y se mantuvo en el cargo hasta el año 1995. Los vecinos y vecinas de Nou Barris, que habían iniciado su lucha en años anteriores para conseguir una mejora en su calidad de vida, continuaron con su tarea reivindicativa, y las asociaciones vecinales y culturales alcanzaron en aquel momento su cota más alta de fuerza y capacidad de decisión. El Ayuntamiento trabajó  conjuntamente con las entidades y pronto comenzó un proceso de transformación que, poco a poco, hizo que Nou Barris se convirtiera en un espacio más de la ciudad de Barcelona. Centros cívicos, casales de barrio y otros equipamientos fueron abriendo puertas, y grandes actuaciones urbanísticas comenzaron a transformar la fisonomía del distrito.

Equipamientos, espacio público y vivienda

El barrio de casas baratas de Can Peguera (anteriormente conocido como Ramón Albó) consiguió que se rehabilitaran el 60% de sus viviendas.

En Canyelles, en 1980 se inaugura el primer Centro de Planificación Familiar i, en 1985, una parte del vecindario participa en una simpática iniciativa conocida como “Canyelles Vichyssoise”, que consistía en pintar un cuento en las paredes del barrio. Un año después se abre el mercado municipal del barrio.

En Ciudad Meridiana, en 1982 se inaugura el nuevo instituto Pablo Ruíz Picasso y tres años después abre sus puertas la escuela Ferrer i Guàrdia. En 1988 se estrena el actual Centre Cívic Zona Nord en el local del antiguo cine del barrio, en 1989 entra en servicio el ambulatorio, y en 1991 se rehabilita la Font Muguera.

También en 1982, en Guineueta se inaugura el monumento a Blas Infante en el Parque de la Guineueta y,  en el mismo año y lugar, se celebra la primera edición de “La Cultura va de Festa”. En 1987, los residentes del Mental son trasladados a otros centros y, seguidamente, parte del edificio se derriba para dar lugar a las futuras promociones de viviendas de Barcinova y Calinova. Los pabellones que quedaron en pie fueron remodelados para albergar allí la sede del Distrito y la Guardia Urbana.

En el barrio de Porta se instala, en 1982, el C.F. Damm y se estrena un campo de fútbol que pronto se convertirá en toda una institución para el barrio. En 1983 se inaugura la nueva plaza Sóller y se estrenan las viviendas destinadas a acoger  vecinos y vecinas provenientes de infraviviendas de otras zonas. Abre sus puertas un nuevo parque de bomberos y también el instituto de bachillerato Francesc Flos i Calcat. Ese mismo año se estrena la plaza de los Jardines de Alfabia y en 1986 se inaugura la nueva Escola Splai en la calle del escultor Ordóñez. En 1990 se inaugura el Parc Esportiu de Can Dragó sobre los antiguos terrenos de Renfe-Meridiana. Cerca de ese mismo lugar, en 1991 se equipan dos nuevos edificios destinados a la enseñanza: el Instituto de Bachillerato Valldemossa y la Escuela de Formación Profesional Meridiana.

En Prosperitat se pone en marcha el nuevo instituto Sant Andreu, actualmente Institut Nou Barris. En 1984 se abre un tramo de la avenida Meridiana como bulevar y no como vía rápida, tal y como los vecinos habían solicitado. En 1986 se inaugura la plaza de Ángel Pestaña sobre el solar de las desaparecidas barracas de Santa Engracia y, dos años después, entra en funcionamiento el Casal de Barri Prosperitat, gestionado por los propios vecinos. Durante esa década los vecinos y vecinas reivindicaron los solares de las clausuradas fábricas de Harry Walker e Hispano Villiers, además de la todavía activa en aquel momento Ideal Plástica Flor para construir nuevos equipamientos. Gracias a la continua lucha vecinal, en 1991 se constituye un Plan Especial de Reforma Interior (PERI) para terminar las mejoras que necesitaba el barrio.

En 1989 se aprobó para Roquetas un plan integral de reforma para recuperar espacios, construir nuevas viviendas y crear nuevos equipamientos. En las fotos, algunas imágenes del barrio.

En Vilapicina se inaugura el nuevo instituto de Bachillerato Barcelona-Congrés y un polideportivo adosado.

Torre Baró continúa siendo un barrio difícil de abordar por sus características y por su especial proximidad a una zona forestal. En 1985 se aprobó un PERI que se aplicó con bastantes dificultades, y en 1989 se rehabilita el Castell de Torre Baró como monumento-icono del distrito. Se construye también un mirador.

En Torre Llobeta, la masía del mismo nombre se convirtió en 1983 en un centro cívico, después de su recuperación y rehabilitación (fotos).  Durante toda la década, los vecinos y las vecinas lucharon por el cierre definitivo por insalubridad de las cocheras de autobuses ubicadas en la avenida de Borbón y la construcción de nuevos equipamientos en su lugar.

En Turó de la Peira se construyeron nuevas viviendas de protección oficial en la calle Doctor Pi i Molist donde en 1984 se inauguró un casal de gent gran. Lamentablemente, en 1990 se derrumbó un bloque de viviendas perteneciente a la promoción construida en los años 50 y se descubrió que la mayoría estaban afectadas por una patología llamada aluminosis. Una parte de los bloques tuvo que ser derribada y otra parte fue sometida a profundas rehabilitaciones.

En Trinitat Nova, en 1981 el edificio de la antigua planta asfáltica comenzó a funcionar como ateneo popular autogestionado, después de su ocupación por parte de los vecinos, y en 1985 se inauguró el parque del barrio.

En Vallbona, después de diversos movimientos vecinales que reclamaban pisos para el barrio, en 1984 se inauguró un conjunto de 64 viviendas nuevas y la plaza Primero de Mayo.

En Verdún se funda, en 1983, el Centre d’Estudis Populars i Arxiu Històric de Roquetes-Nou Barris. En 1986 la plaza de Francesc Layret, y en 1988 las administraciones comenzaron a trabajar para transformar las degradadas Viviendas del Gobernador, trabajo que culminó con la firma, en 1990, de un acuerdo que permitiría llevar a cabo esa renovación. Será la empresa pública ADIGSA, perteneciente a la Generalitat de Catalunya, la encargada de ejecutar esos trabajos durante los años siguientes.

Infraestructuras y movilidad

Respecto a este apartado, se ha de señalar que, ya en 1982, la red de metro se introdujo plenamente en el distrito con la inauguración del tramo Guinardó-Roquetes de la L4 de metro. En 1986 se urbaniza la Via Júlia, convirtiendo esta calle en bulevar en el tramo comprendido entre la plaza Llucmajor y la calle Joaquim Valls, y en una rambla en el segmento que va de la calle Joaquim Valls y la Vía Favència. En 1988 se remodeló el tramo inferior del paseo Valldaura hasta Can Dragó y se rediseñó la plaza de Llucmajor (actual plaza de la República), en la que se instaló el recuperado monumento a la República (foto). Finalmente, en 1990 se abrió un trecho del II Cinturón (Ronda de Dalt), cubierto en un 60% a su paso por Nou Barris. Para la apertura de esta vía rápida, en Trinitat Nova se hubo de dinamitar el “bloque fantasma” (llamado así porque no constaba en los planos municipales y oficialmente no existía), que se encontraba deshabitado desde 1988  (foto).