En una ceremonia celebrada el 28 de abril en Bruselas, la Comisión Europea premió a Barcelona con el título de Capital Europea de la Inclusión y la Diversidad. El galardón, que este año es la primera vez que se ha entregado, reconoce los esfuerzos de las autoridades locales de la Unión Europea por construir sociedades más justas mediante la promoción de la diversidad y la inclusión en aspectos que tengan que ver con el sexo, el origen racial o étnico, la religión o las creencias, la discapacidad, las personas mayores o la identidad LGTBIQ. El premio es una iniciativa de la actual comisaria europea de Igualdad, Helena Dalli, que complementa el Mes de la Diversidad de la UE que se celebra en mayo y que en el caso del Estado está impulsado por la Fundación Diversidad.

La teniente de alcaldía de Derechos Sociales, Justicia Global, Feminismos y LGTBI, Laura Pérez, agradeció en el recibimiento del galardón en Bruselas que desde la Comisión Europea se valore el trabajo de las ciudades como actores en la construcción de una Unión Europea más justa e igualitaria, a la vez que también valoró que se trata igualmente de un premio a la implicación y la labor diaria que realizan las diferentes entidades de la sociedad civil organizada. «Este premio tan importante nos anima a seguir construyendo una ciudad orgullosamente diversa, de la mano de las entidades de los distintos colectivos y de unas vecinas y vecinos que viven la diversidad como una riqueza», subrayó.

Barcelona fue elegida junto con las ciudades de Colonia y Gotemburgo de entre las once ciudades que habían sido seleccionadas como finalistas en la categoría de poblaciones de más de 50.000 habitantes. En esta categoría también habían sido seleccionadas como finalistas las ciudades de Guipúzcoa y Bilbao, en España; Augsburgi Mannheim en Alemania; Bolonia y Reggio de Emilia en Italia; así como Gante y Lovaina en Bélgica. Por otro lado, se habían presentado en una primera fase hasta 82 municipios y autoridades locales europeas.

En el caso de Barcelona, ​​la Comisión Europea valoró la contribución de sus políticas para construir una Europa más inclusiva y diversa, generando un sentimiento de pertenencia y comunidad que ayuda a la construcción de una Unión Europea más justa en la que sienta seguro y pueda desarrollar su proyecto de vida. En su candidatura, Barcelona había puesto en valor su historial en políticas en materia de diversidad e inclusión, reforzadas durante los últimos años con medidas concretas como han sido la apertura del Centro LGTBI, los puntos Konsulta’m para ofrecer soporte psicológico gratuito a la población joven o bien el Plan Municipal de Lucha contra la Islamofobia. Asimismo, la existencia de la Oficina por la No Discriminación desde el año 1998 garantiza el acompañamiento de cualquier persona que sufra algún tipo de discriminación.