Sagrada Família

En el año 1988 el APA construyó una cuca fera. Tenía la cabeza de dragona, elaborada con papel maché. El cuerpo se hizo con tela de saco, de tres metros de largo, recubierta con triángulos de muchos colores, como si fueran las escamas. En el año 1993 se restauró y se crearon seis cabezudos para que la acompañaran: dos representaban a los abuelos del asilo, y los otros cuatro, a polluelos.

No fue hasta el año 2008 que se llevó a cabo el viejo proyecto de crear una gegantona, que tomara el relevo a la vieja Dragoneta. Con la maestría de una madre del AMPA, Gemma Esteve, ayudada por unos cuantos padres y madres, en la fiesta mayor del año 2009 pudimos estrenar la actual gegantona de la escuela. Últimamente se ha convertido en madrina de otra giganta.

Implicación pedagógica actual en el centro

Cuando llega la fiesta mayor del barrio, el profesorado explica la tradición de la fiesta e introduce parte de la cultura de nuestro país. Además, todos los cursos de infantil y primaria realizan una visita a la exposición de gigantes que tiene lugar en Can Fabra, en la Sala Josep Bota. Esta visita cultural, guiada por los portadores de gigantes de Sant Andreu, permite conocer las figuras de las otras escuelas y entidades del barrio, así como sus historias. A partir de la visita a la exposición de gigantes se realizan diferentes actividades que implican las diferentes áreas educativas.

¿Cómo lo viven los maestros?

Para los maestros, la Dragoneta es una herramienta muy buena para hacer conocer las fiestas de nuestro país al alumnado, así como para vincularlo con la fiesta mayor del barrio.

El pasacalle es un gran momento para participar y disfrutar de la fiesta en colectividad, con la Dragoneta y con todo el mundo que forma la comunidad educativa: juntos bailan, cantan y son parte activa de la fiesta. El mundo portador de gigantes les sirve para transmitir y hacer entender una serie de valores, como el esfuerzo, la cooperación, el compromiso y el gozo, que hacen posible que se mantenga esta manifestación cultural popular y, también, para constatar cómo estos valores se materializan y se concretan en la vida asociativa del barrio.

¿Cómo lo viven los niños?

A los niños y las niñas les gusta tener la Dragoneta como compañera. Es un miembro más de la escuela en todos los actos importantes: aparece en la portería durante las festividades principales y en las fiestas más relevantes está en el patio.

La Dragoneta hace de modelo a los niños y niñas cuando realizan dibujos al natural y figuras con barro o plastilina en plástica. Es la protagonista de mil y una historias, de los cuentos o de las poesías que se inventan y escriben los menores.