Historia de la Sagrera
El llano que se extendía a las afueras de la muralla de la ciudad de Barcelona, que llegaba por el norte hasta las orillas del río Besòs y desde las marismas hasta la montaña del Carmel, era conocido con el nombre de Sant Martí de Provençals.
La sagrera o cellera era el espacio sagrado que había en torno a las capillas consagradas, en cuyo interior se construían bodegas o depósitos para guardar vinos y silos para los cereales.
La Sagrera es, pues, la sagrera de Sant Martí: la capilla de Sant Martí de Provençals, ahora situada en el barrio de la Verneda, era la iglesia consagrada, mientras que el barrio actual conserva este nombre porque ocupa el antiguo espacio sagrado de sus inmediaciones.
Los límites de la Sagrera eran los siguientes: al norte, Sant Andreu (Riera de Horta-Cal Borni, donde se situaba una caseta de consumeros); la Torre del Fang por el sur (donde había un abrevadero de caballos); al este, el Rec Comtal y la vía del tren de Madrid-Zaragoza-Alicante; y por el oeste, la vía del tren del norte. La Sagrera era la zona de paso para ir al Vallès y al Maresme.