¿Es importante leer en voz alta? ¡Y tanto, que lo es! Ésta es la tesis principal del libro Los beneficios de la lectura en voz alta (Enciclopedia Catalana, 2023) que acaban de publicar David Bueno, doctor en biología, profesor e investigador de la Sección de Genética Biomédica, Evolutiva y del Desarrollo de la Universidad de Barcelona, también director de la Cátedra de Neuroeducació UB-EDU1st; Anna Forés, doctora en Filosofía y Ciencias de la Educación y Licenciada en Pedagogía para la UB, codirectora del posgrado de Neuroeducació de la UB y directora adjunta de la Cátedra de Neuroeducació UB-EDU1st y Antoni Ruiz Bueno, doctor en Educación y Sociedad y Licenciado en Filosofía y Letras (sección Psicología), profesor asociado de la UB.
Los beneficios de la lectura en voz alta explica, cómo su título indica, la importancia de esta actividad, sobre todo, durante los años de infancia. Según se concluye en el libro, compartir ratos de lectura en voz alta con los niños contribuye a:
- La integración somatosensorial (procesos motores, auditivos y visuales, y a menudo también táctiles y olfativos), que hace que los aprendizajes tengan más impacto en el cerebro, por lo cual los recordamos mejor y podemos utilizarlos con más eficiencia.
- El establecimiento de vínculos emocionales y del trabajo de las emociones.
- La potenciación de la teoría de la mente, que nos permite tener más competencia empática.
- La maduración de las funciones ejecutivas, que incluyen actividades básicas y transversales como la capacidad de planificar, de reflexionar de tomar decisiones y de gestionar las emociones.
“La lectura en voz alta con niños mejora las habilidades lingüísticas y auditivas y enriquece su vocabulario de manera más eficiente, también hace que incrementen más fácilmente la complejidad sintáctica de las estructuras lingüísticas (…); favorece que el cerebro de los niños asocie el hecho de leer a sensaciones de bienestar y placer; genera conocimientos básicos que ayudan a incorporar de manera más eficiente los nuevos aprendizajes y proporciona un buen modelo de hábito lector e inculca el deseo de leer, entre otros”.
Leer en voz alta es una práctica educativa muy valiosa y David Bueno, Anna Forés y Antoni Ruiz Bueno han querido analizar este hábito mediante la encuesta “Leer en voz alta en familia”, realizada a una serie de familias catalanas. “La muestra final de personas que han contestado la encuesta ha sido de 2.164, de las cuales el 66% afirman leer en voz alta en familia. El resto, el 34%, dicen no hacerlo. Sin embargo, el 62,2% de los que dicen que actualmente no leen en voz alta con los hijos e hijas no lo hacen, según los datos de la encuesta, porque éstos ya son grandes, pero sí que lo hacían cuando eran pequeños”, se puede leer en el libro. Detallamos algunas de las conclusiones de la encuesta. Por ejemplo, después de hacer lecturas en voz alta en casa:
- Los niños piden ir a la biblioteca.
- Los niños tienen más vocabulario y utilizan más palabras que antes.
- Los niños piden tener y leer más libros.
- Los niños piden la continuidad de la lectura.
- Los niños tienen más ganas de leer de manera autónoma.
También es importante destacar que: “(…) Aproximadamente el 78% de los progenitores afirman disfrutar mucho o fuerza de los ratos que dedican a leer en voz alta con sus hijos e hijas, un porcentaje que es todavía superior entre los niños, del 90%. El disfrute, sin duda, es un elemento crucial del proceso.
Para abordar todas estas cuestiones, hemos entrevistado a una de las autoras del estudio: Anna Forés.
Empezamos por el principio: es importante leer en voz alta incluso durante el periodo de gestación. Escribís: “Se ha visto que la activación neuronal de las zonas lingüísticas y auditivas del cerebro de los bebés que oyeron como sus madres hablaban o leían a menudo en voz alta durante el último mes de gestación es más intensa y responde más rápidamente a los cambios de tono, cosa que indica que han sido estimuladas”.
Los pequeños y pequeñas que se encuentran dentro del vientre gestante pueden reconocer la tonalidad de la voz de la madre. Esta tonalidad, de hecho es la que marca, en un inicio, el sentimiento de pertenencia.
También es muy importante leer a los niños por lo bajines.
La lectura por lo bajines fomenta la parte emocional del vínculo. La etapa de los 0 a los 3 años es muy importante y es fundamental para el establecimiento de un vínculo seguro. La lectura de proximidad, además de generar vínculo, genera una sensación de placer al bebé.
“Leer es una acción que no entiende de imperativos. No hay nada peor que leer por obligación”.
Ni amar ni leer son imperativos. Como nos acercamos a las lecturas es el quid de la cuestión. Por ejemplo, una manera de incentivar la lectura en las aulas es invitar los autores y autoras, siempre que sea posible, a hablar sobre los libros. A los niños les resulta muy motivador, porque pueden plantear dudas e intercambiar opiniones.
¿Crees que se hace bastante lectura en voz alta a las escuelas?
Yo valoro mucho el papel que tenía la biblioteca escolar hace unos años. Se trata de un espacio muy especial e importante, y se tiene que trabajar para darle un buen uso y sacarle todo el provecho, Tengo la sensación, sin embargo, que algunas escuelas e institutos han abandonado estos espacios. También veo experiencias muy positivas en las cuales se trabaja la lectura desde una vertiente más lúdica.
Hay una información que destacáis al libro y que sorprende. Está en relación con la lectura sobre el apoyo en papel y en digital: “La plasticidad neuronal que permite que el cerebro recicle diversas estructuras y las interconecte para hacer posible la lectura también comporta que no sea exactamente lo mismo leer utilizando un apoyo de papel o digital. Casi un centenar de estudios señalan que hay algunas diferencias interesantes que hay que tener en cuenta (…) Leer en papel permite adquirir una mayor comprensión de aquello que se lee, favorece que lo recordemos y facilita que reflexionemos críticamente”.
Efectivamente, no tiene los mismos efectos leer en papel que en formato digital. Durante la lectura en papel entran en juego otros sentidos y las fuentes de información se multiplican considerablemente. Es cierto, sin embargo, que leer en digital resulta muy práctico.
Pero en las escuelas se ha sustituido el papel por las pantallas.
Sí, pero todavía no han pasado bastantes años para tener evidencia científica clara. No se trata de demonizar las pantallas; sin embargo, también hay veces que hace falta trabajar con el papel, salir del contenido digital e ir a la naturaleza.
Si se lee en papel es más fácil centrar la atención.
Si lees en papel, puedes eludir la pantalla, pero si lees desde la misma pantalla, pierdes atención. Y si no prestamos atención, no aprendemos.
¿Qué tenemos que hacer, si queremos hacer una lectura provechosa en voz alta?
Tenemos que buscar el momento de sentarse a leer juntos, buscar un contexto de calor e intimidad. Se tiene que crear el hábito y que el niño asimile esta actividad de lectura en voz alta con un sentimiento de seguridad, confortabilitat y de placer. Se puede leer un cuento antes de ir a dormir, o buscar un rato los domingos para hacerlo, etcétera. La actividad de leer en voz alta va más allá de la lectura en sí misma. Es decirle al niño: estoy para ti.
En el libro se asegura de que la lectura en voz alta también contribuye a consolidar aspectos claves de la capacidad de socialización de los niños y aumenta la creatividad.
La cuestión radica en el hecho de compartir: leer en voz alta es una manera de estar con éste otro que te acompaña, pero también es estar contigo mismo y misma. Se trata de compartir el bien más preciado que tenemos: nuestro tiempo. Leer en voz alta tiene una parte social muy valiosa. Con respecto a la creatividad, es evidente que quien lee mucho puede imaginar muchas vidas y puede entrar en muchas historias diferentes.
¿Cuáles son los requisitos de un buen lector o lectora?
Para hacer una lectura provechosa, el primero que hace falta es tener curiosidad en aquello que leemos, porque es precisamente la curiosidad la que nos hace leer. Y el reto está aquí: fomentar esta curiosidad entre los niños y los jóvenes, que, por otra parte, también resulta innata.
Los datos de este estudio se extraen de una investigación llevada a cabo con 2.160 familias catalanas.
Sí, y ya avisamos de que las conclusiones pueden ser ligeramente sesgadas, porque las familias que no leen no han contestado la encuesta. La realidad de las familias donde se lee poco, o directamente no se lee nunca, no queda reflejada. No obstante, la encuesta es bastante amplia para ser significativa.
¿Cómo fue el proceso de participación de las familias?
Este libro es fruto de un encargo de Enciclopedia Catalana. En los Estados Unidos hay muchas investigaciones de este tipo, pero aquí no hay tantas, por lo tanto, era necesario. Llegamos a las familias a través de las escuelas y los institutos y sus redes. La encuesta se contestaba a través de un formulario en línea.