ANDAR DESCALZO

El pie es el resultado de millones de años de evolución, una eficaz estructura que permite andar largas distancias con un mínimo coste energético sin la ayuda de elementos externos, como el calzado, un invento de uso general en los últimos siglos. Cada uno de los pies tiene veintiséis huesos, treinta tres articulaciones y más de cien tendones, músculos y ligamentos. Nuestros pies son una auténtica obra de ingeniería evolutiva diseñada para caminar por los terrenos más insólitos.

La disposición de los huesos y los músculos permite que el pie se adapte al terreno que pisa para evitar heridas y lesiones y, al mismo tiempo, maximizar el impulso. Los dedos mantienen el equilibrio del cuerpo en todo momento y el talón sostiene el peso del cuerpo cuando no se anda. En el arco del pie hay una zona que, en deformarse a cada paso, bombea sangre piernas arriba. Debajo la piel de la planta, una capa de grasa especialmente importante en los niños/as, aísla y amortigua los golpes. La temperatura captada por la piel de la planta hace que se adapte la circulación de la sangre al pie para calentarlo si fuera necesario. Además, el contacto con el suelo sucio refuerza el sistema inmunológico.

Andar descalzo es fácil, los seres humanos lo hemos hecho siempre bien hasta que los zapatos nos han variado la forma de andar. Calzados tenemos tendencia a hacer primero un golpe de talón en el suelo y después dejar caer el resto del pie también de golpe. No es la mejor manera de andar, genera demasiadas cargas en las articulaciones de las piernas. A diferencia, descalzo, el pie carga el peso sobre la parte delantera, detrás de los dedos (independientemente cual sea la parte que primero toca al suelo), donde la compleja estructura de huesos y músculos absorbe los impactos y las irregularidades del camino. Cada tipo de suelo requiere diferentes técnicas aunque son intuitivas. Sin embargo, quién anda descalzo no lo debe olvidar y es necesario prestar atención donde pone los pies.

Como el pie es un órgano sensitivo tan fino como la mano, andar descalzo abre todo un mundo de sensaciones donde cada paso es diferente al anterior. También es ecológico, pues un pie desnudo no estropea las plantas que pisa y, puesto que no hace ruido, no se molesta a nadie.

A menudo, el hecho de sacarse el calzado nos libera, nos hace sentir acogidos y, en parte, esto pasa porque los zapatos no respetan la forma natural de nuestros pies. Cada planta del pie tiene unas siete mil quinientas terminaciones nerviosas que conectan con el resto del organismo. Los pies son nuestro soporte terrenal, las raíces, y a la vez aquello que nos puede dejar quietos o transportar lejos. El lugar hacia donde apuntan los pies es hacia donde nos queremos dirigir. Pero estos no sólo quieren quedar libres, sino que también necesitan un contacto con la natura. Los pies reclaman la diversidad natural, diferentes texturas y temperaturas.

Así que, tal como dicen que andar descalzo por la playa es muy saludable, andar descalzo por casa también. El pie puede adoptar posiciones que con un zapato difícilmente podrá. De este modo se fortalece la musculatura del pie y del tobillo y así los niños estarán más preparados para andar, correr, saltar, etc.

BENEFICIOS DE ANDAR DESCALZO:
- Permite trabajar todas las articulaciones, fortalecer la musculatura, endurecer la planta del pie y evitar las malformaciones de los pies planos. Como consecuencia, ayuda a mejorar la postura y la flexibilidad.
- Se trabaja el equilibrio y el cuerpo tiende a situarse naturalmente en su centro, evitando el impacto excesivo sobre el talón y proporcionando un balanceo repartido por todo el pie.
- Regula el sistema nervioso y el organismo en general.
- Potencia la autoconfianza, la consciencia y la observación.
- Mejora la sensibilidad y permite desarrollar percepciones del tacto de los pies.
- Proporciona vitalidad, sensación de bienestar y a la vez favorece el descanso.
- Vinculación a la natura y a la tierra a la vez que libera cargas electromagnéticas.
- Si se hace cuando haya humedad, potencia aún más la circulación y la oxigenación del organismo. Por tanto, la capacidad que éste tiene de eliminar toxinas y regenerarse.
 
Informaciones sacadas de las siguientes webs que a su vez permiten ampliar la información:

https://juandescals.blogspot.com/2010/04/caminar-descalc.html
https://www.encis.coop/caminar-descalc-una-proposta-educativa/

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