Como escuela ponemos la mirada en el niño en el centro y como protagonista. Tratamos de ofrecer propuestas basadas en el juego libre, que es fuente de placer y satisfacción, gratificante de por sí, espontáneo y activo. Es en esta línea que nos interesamos por la propuesta de los mini mons ya que consideramos que les permitiría desarrollar muchas habilidades importantes.
El juego con mini mons es una propuesta diseñada con el objetivo de favorecer la creatividad y la imaginación, mediante escenarios que representen situaciones de la vida real o imaginarios. Es una representación de mundos creados a partir de “piezas sueltas” y otros elementos que pueden ser representativos y que invitan al juego simbólico. Son elementos que no tienen una finalidad definida y será el niño quien busque el propósito de cada uno utilizando su imaginación. De esta forma el material que utilizamos para que lo puedan combinar tiene elementos no estructurados, naturales, así como de plástico, ya que queramos o no forman parte de su realidad y también algunos animales, trenes, ...
La propuesta de Mini mons potencia la imaginación y la creatividad. Trabaja el vocabulario, la psicomotricidad fina, la inteligencia sensorial, la paciencia y la concentración. También la cooperación, al ser una propuesta que se realiza en pequeño grupo, la resolución de problemas, la experimentación, la lógica y el lenguaje matemático, entre otros.
En nuestra escuela se hace la propuesta en grupos pequeños, se delimita el espacio y se preparan unas cajas con el material. El ambiente cambia según va dirigido a un grupo u otro. La educadora responsable de preparar la propuesta tiene en cuenta dar sensación de orden, seleccionando los elementos más sugerentes, ubicándolos de forma armónica e intentando aprovechar todas las posibilidades de juego. Se busca la belleza y el atractivo para captar la atención, la participación y la manipulación por parte de los niños.
El adulto se muestra como acompañante y facilitador de situaciones de creación. Su actitud será respetuosa, observadora i si considera oportuno interviene con preguntas y verbaliza las acciones, poniendo palabras. La observación nos ayuda a saber en qué momento del desarrollo se encuentra el niño, cuáles son sus intereses y cómo se relaciona con los demás. También nos dará pistas de cómo ve el mundo que le rodea. Utilizamos imágenes para documentar el proceso, de esta forma se hace una reflexión de la evolución cognitiva que van desarrollando los niños.
