Para los grupos de niños mayores de la escuela, los días de lluvia se convierten en días especiales. Cada niño/a dispone de su peto y sus botas de lluvia para poder salir a jugar a nuestro jardín cuando llueve.
La lluvia es un elemento sensorial muy rico que encontramos de forma natural en nuestra vida cotididana. Aprovechar los dias de lluvia como una oportunidad, no solo, nos permite acercar la naturaleza a los pequeños, sino que abre un amplio abanico de oportunidades para disfrutar de nuevas sensaciones y descubrimientos: el olor a humedad, el ruido rítmico que se emite, la transformación de la arena en barro, la creación de charcos de agua, los golpecitos de las gotas sobre el cuerpo... Oportunidades donde niñas y niños sacan el máximo provecho a la vez que llenan los días grises de sonrisas!
"La infancia desaparece o se difumina cuando el charco visto com una oportunidad se convierte en un elemento a esquivar."
