Plan de barrios. A partir del mes de septiembre, se dispondrá de un nuevo servicio de canguraje en seis espacios de la ciudad en el marco del Plan de barrios.
A partir del mes de septiembre, se dispondrá de un nuevo servicio de canguraje en seis espacios para facilitar la conciliación laboral, familiar y personal en zonas con menor renta y que forman parte del Plan de barrios. El proyecto Concilia funcionará, en un primer momento, como prueba piloto durante cinco meses, de forma ininterrumpida hasta el próximo 31 de enero, y estará activo entre las 8.00 y las 20.00 horas, durante los siete días de la semana.
El objetivo es atender sobre todo las solicitudes de familias monoparentales femeninas con pocos recursos económicos, con una red comunitaria débil, con el fin de facilitar su participación en cursos de formación, su incorporación en el mundo laboral, su implicación en la actividad social del barrio y poder ofrecerles momentos puntuales de descanso.
¿Qué se hará en ellos?
Los seis puntos tendrán capacidad para acoger a entre seis y ocho niños por hora, siempre de entre 3 y 12 años, y estarán gestionados por una veintena de educadores y educadoras que trabajarán a jornada completa, atenderán a los niños y las familias cuando lleguen al servicio y programarán y dinamizarán las actividades que se realicen. Eso, además, posibilitará el empleo juvenil y, para hacerlo posible, se ha puesto en marcha un concurso público destinado a empresas y entidades sociales que ya trabajan actualmente en el sector del ocio educativo.
A los niños se les quiere ofrecer una atención básica, ludicosocial y educativa en aquellos momentos en los que se pueden quedar solos en casa en ausencia de su madre, padre o persona responsable, siempre que no dispongan de otros recursos más adecuados.
Se priorizará las solicitudes según estos criterios:
¿Dónde están los espacios del proyecto Concilia?
Los espacios estarán ubicados en seis zonas comprendidas dentro del Plan de barrios:
Esta iniciativa forma parte igualmente del Plan de choque social que se ha puesto en marcha para hacer frente a los efectos socioeconómicos generados por la COVID-19, y que han golpeado de forma más fuerte los barrios más vulnerables.
Por esta razón, las derivaciones a los servicios se realizarán preferentemente desde servicios municipales tales como el centro Barcelona Cuida, los centros de servicios sociales, Barcelona Activa, el Plan de barrios, los puntos de información y atención a las mujeres (PIAD) o el Servicio de Atención, Recuperación y Acogida (SARA), pero también desde entidades sociales de la ciudad que trabajan en el territorio.
