8M | Mujeres emprendedoras en los mercados: el impulso de Cristina y Sheila
El 8 de marzo conmemoramos el Día Internacional de la Mujer, una fecha marcada en nuestro calendario por su carga reivindicativa y su simbolismo en la lucha por la igualdad. Este día nos invita a reflexionar sobre el papel fundamental de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad, reconociendo los avances logrados y considerando todo el camino que aún queda por recorrer.
Con motivo de esta celebración, queremos poner en valor el trabajo y la dedicación de todas las vendedoras de los Mercados de Barcelona. Cada día, con esfuerzo y pasión, contribuyen a hacer de nuestros mercados espacios vivos y esenciales para los barrios. Por eso, hoy nos adentraremos en dos historias que son un ejemplo de ello: las de Cristina Valls, del mercado de Provençals, y Sheila Ferrer, del mercado de Ciutat Meridiana. Hace poco que emprendieron su negocio con coraje y determinación, y este 8 de marzo, su valentía simboliza la de tantas otras mujeres que hacen de los mercados un lugar de oportunidades y futuro.
Cristina Valls - Ous Frescos Kris (mercado de Provençals)
En primer lugar, nos trasladamos al barrio de Sant Martí, concretamente al mercado de Provençals. Allí encontramos a Cristina Valls, propietaria de Ous Frescos Kris, una huevería donde se pueden encontrar hasta siete variedades de huevos: ecológicos, de corral, blancos (de gallina blanca), marrones (de gallina marrón), de dos yemas, de pato y de codorniz. Próximamente, este número aumentará a ocho, ya que también incorporará huevos de oca.

Para entender el presente de Cristina, primero hay que conocer el recorrido que la ha llevado a abrir su propio negocio. El mercado no es un territorio desconocido para ella, ya que años atrás fue la propietaria de la floristería exterior. "Paseando por el barrio me fijé en que el negocio estaba en traspaso, lo estuve pensando y decidí quedármelo", nos cuenta. Con esta determinación, apostó por la floristería, donde trabajó durante ocho años. Tiempo después, con ganas de hacer un cambio y un poco saturada por el trabajo, decidió vender el negocio y buscar nuevos horizontes.
Al dejar la floristería, comenzó a trabajar en un sector totalmente diferente, pero la experiencia no fue como ella esperaba. En ese momento, Cristina ya tenía en mente la idea de volver al mercado de Provençals, donde sabía que había un puesto vacío, pero aún no tenía claro qué tipo de negocio abrir.
¿Por qué finalmente se decantó por los huevos? Un día, paseando por el mercado de Collblanc, le llamó la atención un puesto de huevos. Decidida, contactó con el encargado para conocer más sobre el negocio. Tras unos días de conversaciones, coincidió que en la huevería de Collblanc buscaban personal: "el propietario tenía también un supermercado y me ofreció trabajo de lunes a jueves en el supermercado y los fines de semana en el puesto del mercado". Motivada por su valentía y ganas de mejorar, dejó su empleo y aceptó la oferta.
Después de un tiempo combinando ambos trabajos, el negocio de los huevos la convenció por completo. Sin experiencia previa, el trabajo en el puesto de Collblanc le ayudó a aprender, familiarizarse con el producto y conocer el negocio. Decidida, dio el paso de convertir el puesto vacío de Provençals en una huevería. Tras trámites, reformas y preparativos, Ous Frescos Kris abrió sus puertas el 9 de diciembre de 2024.

Después de casi tres meses con el negocio en marcha, Cristina nos cuenta con satisfacción que tiene clientela, que "quienes compran están muy contentos" y reconoce que su reto ahora es lograr que el negocio crezca.
Para Cristina, tener su puesto en el mercado de Provençals es como jugar en casa. Es del barrio y conoce a su gente, en gran parte gracias a los años en la floristería. Esta es una de las razones que la motivó a seguir adelante con el negocio: "si este puesto estuviera en otro mercado, quizás no lo habría abierto". Sin duda, esto la impulsa a seguir haciendo crecer su negocio. Determinada, valiente y emprendedora, la experiencia de Cristina ejemplifica la importancia de la perseverancia y el deseo de reinventarse sin conformarse. Para saber más sobre Ous Frescos Kris, no dudes en seguir su perfil de Instagram y conocer todas las novedades.
Sheila Ferrer Monteiro - Frutas y verduras Monteiro (mercado de Ciutat Meridiana)
Y si hablamos de mujeres emprendedoras y valientes, no podemos olvidarnos de Sheila Ferrer, de Frutas y Verduras Monteiro. Sheila tiene solo 28 años y ya cuenta con su propio puesto en el mercado de Ciutat Meridiana, un negocio que abrió en noviembre del año pasado.
Su conexión con el mercado es familiar, ya que justo al lado de su puesto se encuentra la Cansaladeria Ondina, propiedad de su tía y donde también trabaja su madre. Así que ha crecido en el mercado desde pequeña: "cuando tenía cuatro años, mi madre tenía un puesto en el mercado de Montserrat y yo ya me colocaba detrás del mostrador".

Antes de abrir su frutería, Sheila estudió un grado medio en Laboratorio de Imagen y Sonido, además de dos años en un grado medio de Cocina. Aun así, desde joven ha estado vinculada al mundo de la fruta: trabajó durante ocho años en la frutería de un supermercado. Tras quedarse sin empleo, su carácter activo le impedía estar en casa sin trabajar, así que decidió capitalizar el dinero del paro y reabrir la frutería del mercado.
Montar un puesto es un proceso largo que requiere mucha dedicación. Y una vez abierto, el esfuerzo no disminuye, sino que aumenta. Sheila, que es madre de una niña pequeña, confiesa que "es difícil compaginar el negocio con la vida familiar, ya que la frutería necesita muchas horas". Sin ir más lejos, mientras hablamos con ella, está trabajando y pendiente del móvil porque su hija está enferma. Su capacidad de sacrificio y organización es admirable, y esencial para equilibrar sus responsabilidades.
El balance de estos primeros meses es positivo: "voy tirando, que ya es mucho". Tener el puesto de su tía al lado es un gran apoyo: "me viene bien porque ellas llevan aquí 17 años y, como yo también he venido desde pequeña, la clientela me conoce y viene a comprarme también". Además, se esfuerza por ofrecer el mejor servicio realizando entregas a domicilio para las personas mayores que no pueden bajar al mercado. Incluso, si se lo piden, añade a las entregas productos de la charcutería.
Reflexionando, Sheila nos dice que "a una persona joven le diría que se animara a invertir en el mercado. Es un sacrificio que requiere mucho esfuerzo, pero que vale la pena". Explica que quiere que los jóvenes vengan y ayuden porque "es bueno para el vecindario y para el mercado". Es un trabajo muy sacrificado, pero esencial para "hacer mercado entre todos".
Su labor no acaba en la frutería, ya que también gestiona las redes sociales de su puesto y del mercado, una tarea que disfruta, pues además tiene conocimientos de diseño gráfico. Sheila nos cuenta que, gracias a su actividad en redes, la frutería ha llegado a clientes de diferentes zonas de Barcelona.

De cara al futuro, su objetivo es estabilizarse aún más y conseguir que haya más vida en el mercado: "tenemos que hacer actividades y propuestas para el barrio y el mercado". Con iniciativa y compromiso, Sheila es el ejemplo perfecto de una persona joven involucrada en su barrio para mantener la esencia del mercado de Ciutat Meridiana.
En el Día Internacional de la Mujer, celebramos la voluntad y el coraje de mujeres como Cristina y Sheila, que con su esfuerzo y determinación se convierten en ejemplos de la lucha que representa esta celebración.
