Mercats de Barcelona

En el mercado, la fresa y el fresón son protagonistas cuando llega el buen tiempo. Jaume, de Fruits del Camp del mercado de Sants, un puesto con 38 años de historia, nos explica hoy sus particularidades, variedades y procedencia.

En primer lugar, nos enseña a diferenciar entre la fresa y el fresón, ya que muchas personas confunden estos dos términos. En realidad, la fresa es una fruta pequeña y muy dulce que empieza la temporada un poco antes que el fresón, mientras que el fresón llega entre principios y mediados de abril, mientras que la fresa llega a mediados de marzo, madurando antes por su tamaño. En cambio, el fresón es más grande y presenta una gran variedad de sabores, dependiendo del tipo y del momento de la cosecha.

Actualmente, la gran mayoría de fresones (un 90%) vienen de Huelva, gracias a su clima cálido, que permite una producción abundante. A pesar de ello, en nuestra zona también se cultivan fresas, pero en cantidades más reducidas y con un sabor menos dulce en esta época del año. Sin embargo, a principios de abril, las fresas locales ganan dulzura y se convierten en una opción mejor.

No todas las variedades tienen el mismo sabor. Algunas son más dulces e intensas, mientras que otras tienen un sabor más suave. Uno de los frutos más dulces al inicio de la temporada son las variedades de fresones y fresas del Maresme. No obstante, la dulzura también depende de cómo y cuándo se recogen, ya que algunos productores recogen el fresón en su punto óptimo de maduración, mientras que otros lo hacen un poco antes para tener más producto a la venta, sacrificando y perjudicando la calidad y el sabor final.

Otra curiosidad es la llegada al mercado y a algunos campos de Huelva de una nueva variedad de fresa blanca, con un sabor sorprendente que recuerda al de la piña. Su origen se encuentra en América Latina, y recientemente se está empezando a cultivar en territorio nacional, donde está ganando mucha popularidad.

El cultivo de fresas ha ido evolucionando con el tiempo. Hoy en día, es muy habitual que estas frutas se cultiven hidropónicamente, con una estructura que evita que las fresas estén en el suelo, facilitando la cosecha y evitando que los recolectores tengan que agacharse. También desde hace tiempo se utilizan invernaderos semitapados, que nos permiten tener fresas incluso en enero, aunque no sea la temporada que les corresponde.

Jaume Griñan, el encargado del puesto del mercado, nos deja como reflexión final que la fresa y el fresón son frutas que, según el origen, la variedad y el punto de maduración, pueden ofrecer sabores muy diferentes. Elegir las más rojas, conocer las variedades y comprar en lugares de confianza son las claves para disfrutar al máximo de esta fruta.