Se presenta un nuevo recurso educativo que acerca al alumnado de la ciudad a las diversas realidades de las personas refugiadas, especialmente niños, niñas y jóvenes.

El pasado día 17 de junio, mediante un webinar, se dio a conocer el proyecto Barcelona refugio en corto de la Associació Xarxa de Mitjans d’Educadors i Comunicadors (Teleduca), Edualter y Sodepau, que ha sido subvencionado por la Dirección de Justicia Global y Cooperación Internacional del Ayuntamiento.

El objetivo del proyecto es facilitar a los centros educativos de Barcelona materiales audiovisuales y didácticos, mediante una web, para abordar temas como: el refugio y el asilo, los desplazamientos que se ve obligada a hacer la población o las causas que los originan, entre otros, desde una perspectiva que permite vivenciar los hechos y empatizar.

Como destacó David Llistar, director de Justicia Global y Cooperación Internacional, en la sesión de presentación, este proyecto se realiza en un momento muy necesario de recursos educativos telemáticos y es un gran acierto presentar la temática del desplazamiento, el refugio y el asilo mediante el testigo de los y de las protagonistas de forma tal que despiertan empatía y entran en la piel de los niños, niñas y jóvenes.

Los cortometrajes, que incorporan una guía didáctica, son producciones de diferentes países de iniciativas privadas, públicas y participativas que destacan por tener un alto valor educativo, ya que trabajan la justicia global, la educación por los derechos humanos y la educación por la paz. El proyecto también incluye la organización de actividades complementarias de formación y dinamización y sesiones de cine-fórum.

En un entorno como el que nos está dejando la COVID19 proyectos como éste son muy necesarios para no olvidar que la situación de vulneración de derechos y de precariedad en que viven muchas personas en todo el mundo no se ha aliviado, sino al contrario. Según datos del ACNUR, el 80% de las personas refugiadas se encuentran en países con ingresos bajos o medios, en los que los sistemas de salud y saneamiento son más débiles que en España, y se concentran en campos de refugiados superpoblados o en zonas urbanas donde los servicios médicos y de higiene no son adecuados.