El CEMB pide una mayor transparencia en el proceso de clasificación de complejidad de los centros educativos

El Plenario del Consejo Educativo Municipal de Barcelona (CEMB) ha aprobado un manifiesto a petición de las familias que pide que se asignen más recursos a la lucha contra la segregación escolar y que el proceso de clasificación de complejidad de los centros educativos y asignación de recursos sea más transparente y participativo.

Según datos del Consorcio de Educación de Barcelona, ​​en este curso 36 centros educativos de la ciudad han visto reducido su baremo de complejidad y sólo 2 centros lo han aumentado, lo que ha supuesto un recorte importante de recursos en la lucha contra la segregación en la ciudad de Barcelona.

Además, tal y como se denuncia en el manifiesto, esta decisión se ha tomado en base a un estudio realizado con datos del curso 18-19, unos datos que consideran anticuados y que no reflejan la realidad actual después de la pandemia.

Es por ello que en el texto se pide una moratoria de al menos dos años por la decisión de la bajada de complejidad o, en su defecto, una garantía de asignación de recursos equivalentes a los centros que han visto reducido su nivel de complejidad.

También se propone que se llegue a un nuevo modelo de distribución de recursos que ponga la inclusión y la lucha contra la segregación en el centro para garantizar la equidad educativa y que tenga en cuenta fuentes de datos actualizadas permanentemente y más ajustadas a la situación real del alumnado y los centros.

Por último, el manifiesto pide que el proceso de clasificación de complejidad de los centros educativos y de la asignación de recursos sea más transparente y cuente con la participación de la comunidad educativa.

Una de las cuatro comisiones de trabajo del CEMB que se pondrán en marcha este mes de noviembre tratará precisamente sobre los centros de máxima complejidad, analizando a fondo la problemática y elaborando un informe con propuestas de mejora.

Primer Plenario del curso 2021-22

El debate sobre la actualización del índice de complejidad en los centros de Barcelona ha centrado gran parte del primer Plenario ordinario del CEMB en este curso. Celebrado el martes 26 de octubre y presidido por primera vez por el nuevo concejal de Educación Pau González, la sesión ha abordado también los datos del inicio del curso escolar en la ciudad y ha presentado y aprobado los informes de las comisiones de trabajo de Mapa escolar y Barrios educadores: expansión comunitaria.

Compartid este contenido