El problema del sobreendeudamiento surge cuando una persona o familia tiene dificultades para pagar sus deudas y cuando está dedicando más del 40% de sus ingresos a pagar deudas.
Las causas del sobreendeudamiento son diversas. En muchas ocasiones, el exceso de deudas coincide con una prolongada caída de ingresos en el tiempo.
Estas situaciones pueden ir a peor a medida que pasan los meses, por la continua acumulación de cuotas impagadas y recargos. Es un efecto bola de nieve que deteriora mucho la situación económica, que tiene un gran impacto sobre el bienestar y del que puede resultar muy difícil escapar.
Éstas son algunas pautas para afrontar situaciones de sobreendeudamiento:
- No te endeudes más. No pidas más préstamos ni hagas compras a plazos sin intereses (¡también son préstamos!).
- No evites el problema. Actúa con la cabeza fría (controla tus emociones).
- Revisa a fondo el presupuesto personal o familiar. ¿Puedes recortar algunos gastos? ¿Puedes aumentar tus ingresos?
- Negocia la deuda. Una vez hayas clasificado la deuda, puedes hablar con el banco y ver si puede ayudarte a reestructurar tu deuda, de manera que se reduzcan las cuotas mensuales y la presión sobre tu presupuesto. Reunificar la deuda tiene sus inconvenientes, pero en casos extremos es una forma de capear el temporal.
- Acógete a la Ley de la Segunda Oportunidad. Si nada de esto funciona puedes tratar de acogerte a esta ley que te puede llegar a exonerar total o parcialmente de tus deudas. Para ello debes cumplir unos estrictos requisitos para demostrar tu insolvencia e incapacidad de hacer frente al pago de tus deudas.
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