La conservación de las viviendas y su entorno es una prioridad a la hora de lograr mejorar las condiciones de vida de los vecinos y las vecinas de Ciutat Vella.
El plan “Dintres” presta una atención especial a las partes del inmueble que no son de cariz superficial o estético, sino estructural y vital para la habitabilidad de las fincas. No se trata, pues, de hacer que las fincas sean bonitas. Se trata de garantizar la seguridad, la salubridad y la habitabilidad conservando los elementos de la finca: fachadas, estructura, instalaciones, cubiertas, etcétera.
El plan “Dintres” quiere garantizar la seguridad y la habilidad de los edificios, pero también detectar posibles situaciones de emergencia social o de acoso inmobiliario (mobbing) y garantizar el realojamiento de los vecinos y las vecinas y el respeto de sus derechos por parte de los propietarios.
Se empezó a trabajar en él en el año 2008, con el objetivo básico de combatir el acoso inmobiliario, en aumento en Ciutat Vella. Durante este periodo de tiempo se ha logrado lo siguiente:
23 obras terminadas
27 fincas en obras
27 proyectos en trámite (licencias, pago de tasas, inicio de obras)
8 ejecuciones subsidiarias (1 forzosa y 7 pactadas)
Se han emitido 33 órdenes de ejecución y se han suscrito 55 convenios de rehabilitación. La fórmula de los convenios facilita que se consigan las ayudas previstas en las convocatorias del Consorcio de la Vivienda.
Aproximadamente el 40 % está en obras o las ha acabado ya. Se prevé que el 22 % las empiece a corto plazo.
Se ha cuidado y tutelado el realojamiento o el retorno de nueve familias afectadas por situaciones muy precarias de la vivienda.
El grado de cumplimiento sigue siendo alto. Solo ha habido que iniciar trece procedimientos sancionadores.
El plan “Dintres” se fundamenta en el deber de conservación definido legalmente como expresión de la función social de la propiedad y en el principio de eficacia administrativa, que comporta que la Administración se implique decisiva e intensamente en la rehabilitación del parque residencial de la ciudad, lo que supone:
Intervenir en los interiores de las viviendas, es decir, no solo quedarse en los elementos comunes como las fachadas, sino también preocuparse de las condiciones de vida de las personas que viven en las fincas.
Asumir la iniciativa de la rehabilitación y hacer el seguimiento de su ejecución aprovechando los instrumentos y las figuras legales de carácter urbanístico y en materia de vivienda que se han ido sucediendo en los últimos años.
La conservación de las viviendas y su entorno es una prioridad a la hora de lograr mejorar las condiciones de vida de los vecinos y las vecinas de Ciutat Vella.
El plan “Dintres” presta una atención especial a las partes del inmueble que no son de cariz superficial o estético, sino estructural y vital para la habitabilidad de las fincas. No se trata, pues, de hacer que las fincas sean bonitas. Se trata de garantizar la seguridad, la salubridad y la habitabilidad conservando los elementos de la finca: fachadas, estructura, instalaciones, cubiertas, etcétera.
El plan “Dintres” quiere garantizar la seguridad y la habilidad de los edificios, pero también detectar posibles situaciones de emergencia social o de acoso inmobiliario (mobbing) y garantizar el realojamiento de los vecinos y las vecinas y el respeto de sus derechos por parte de los propietarios.
Se empezó a trabajar en él en el año 2008, con el objetivo básico de combatir el acoso inmobiliario, en aumento en Ciutat Vella. Durante este periodo de tiempo se ha logrado lo siguiente:
El plan “Dintres” se fundamenta en el deber de conservación definido legalmente como expresión de la función social de la propiedad y en el principio de eficacia administrativa, que comporta que la Administración se implique decisiva e intensamente en la rehabilitación del parque residencial de la ciudad, lo que supone: