Camaradas del tiempo; estrategias para descolonizar la propia práctica artística
Tiziano Cruz
29.09.2022
Desde el 29 de agosto hasta el 3 de octubre de 2022, Tiziano Cruz y su compañía se instalan en los espacios de La Virreina Centre de la Imatge para, desde ellos, desarrollar la tercera parte de Trilogía familiar, una investigación sobre el rol del padre, la madre y los hermanos dentro de una estructura familiar en un contexto de tragedia social, económica y cultural en el norte de Argentina.
En su libro Estética relacional, Nicolas Bourriaud sostiene que «el arte es la organización de presencia compartida entre objetos, imágenes y gente», pero también «un laboratorio de formas vivas que cualquiera se puede apropiar». En esta instancia de apertura de nuestros procesos creativos, creemos fundamental hacernos algunas preguntas muy básicas sobre nuestra forma de trabajo, sobre lo que hacemos: ¿cómo hacemos una obra?, ¿cómo producimos materialidad?, ¿cuáles son nuestros puntos de partida?, ¿qué nos interesa decir?, ¿qué queremos «hacer decir, hacer ver»?
Estamos de acuerdo en dos puntos fundamentales e iniciáticos de nuestra práctica:
- No nos interesa la práctica escénica como desarrollo de un objeto de arte que pueda ser consumido por la élite del arte, sino como la posibilidad de producir una nueva organización del campo social cotidiano, un intento de impactar en el trazo cotidiano y de establecer nuevos lazos sociales, comunitarios, de investigar sobre una subjetividad común.
- Cada vez que iniciamos un proceso de trabajo, lo hacemos desde la forma de banquete. Nos reunimos a comer y tomar vino alrededor de una mesa, mientras hablamos, compartimos textos, nos mostramos imágenes y vamos escribiendo algún texto común.
Dice Boris Groys en Volverse público que «el arte ya no se entiende como la producción de obras de arte, sino como la documentación de una vida-como-proyecto; más allá de sus resultados». Nos interesa la producción artística como un medio para hacer vínculo, como una forma de compartir un gesto, un momento, un espacio temporoespacial. Volvernos, por un rato, camaradas del tiempo, inventar una amistad, también un silencio, hacia una estética común…
Proponemos como acción convidar a una mesa con empanadas del norte de Argentina hechas por nosotros y algunas botellas de vino, con textos e imágenes de los procesos que venimos realizando, en la que compartiremos nuestros modos de hacer y la lectura de pequeños fragmentos de obra.
Por Tiziano Cruz, en compañía de Rodrigo Herrera, Luciana Iovane, Luciano Giambastiani y Rosa Studio.