La Comisión de Participación de la Comunidad Educativa del Consejo de Educación Municipal de Barcelona (CEMB) celebró este 31 de marzo su cuarta sesión, que contó con la presentación de varias propuestas para mejorar la implicación de los estudiantes en los espacios de decisión. En este encuentro, se destacó la importancia para el CEMB de consolidar al alumnado como agente activo en la comunidad educativa.
Los puntos centrales de la sesión giraron en torno a la participación estudiantil y la forma en que esta puede ser más efectiva y reconocida. La representación del alumnado en el CEMB expuso un conjunto de 21 propuestas para mejorar la representación y empoderamiento del alumnado dentro del CEMB, con propuestas como la ampliación de la representación del alumnado en el CEMB, permitir la participación de entidades juveniles en las discusiones, la realización de sesiones informativas que faciliten la comprensión de los espacios de participación o el impulso de asambleas de delegados y delegadas en los centros para dar más voz al alumnado. Un punto al que se prestó mucha atención fue el reconocimiento de las competencias adquiridas por los estudiantes en los espacios participativos. En este sentido, se propuso la creación de un sistema de acreditación oficial que no solo acredite la participación en sí misma, sino también las competencias y habilidades adquiridas.
Desde el Observatorio de la aFFaC se presentó el estudio ‘Alumnat i jornada escolar. Experiències, valoracions i propostes’, con el objetivo de incorporar la voz de los niños y niñas y adolescentes en la toma de decisiones sobre la jornada escolar. La investigación busca entender cómo la configuración de la jornada impacta en el rendimiento, el bienestar y la conciliación familiar, y aporta información para el debate sobre los horarios escolares en los centros públicos de Cataluña. El estudio incluye cinco centros educativos públicos de primaria y secundaria de Cataluña, que representan la diversidad territorial, socioeconómica y educativa, con alumnado del último ciclo de primaria y de ESO. El trabajo de campo combinó encuestas y grupos de discusión y cuenta con una muestra de 555 alumnos, 18 grupos de discusión y más de 100 fuentes bibliográficas consultadas. Los resultados se presentarán públicamente el 29 de abril de 2025.
Por su parte, el Consejo de la Juventud de Barcelona presentó un informe sobre el estado de la participación estudiantil. Las conclusiones del estudio destacan la necesidad de transformar las estructuras de participación para garantizar que estos espacios fomenten una implicación activa del alumnado. También subrayan la relevancia de la figura docente como facilitadora del proceso participativo y señalan que la visión individualista y jerárquica de la participación dificulta el sentimiento de grupo y, en consecuencia, la organización del alumnado. Además, el informe concluye que la autoorganización del alumnado actúa como un motor que impulsa la participación tanto en espacios institucionales como no institucionales.
La sesión se cerró con un debate constructivo sobre cómo mejorar la inclusión de los jóvenes en todos los niveles de la toma de decisiones educativas. El próximo encuentro de la comisión, que tendrá lugar el 19 de mayo, será clave para cerrar las propuestas y consensuar un informe final que servirá de base para futuras acciones.
