La jubilación es una etapa muy importante en el ciclo vital de una persona, por la que vale la pena prepararse desde el punto de vista económico porque puede durar muchos años (cada vez más si observamos la evolución de la esperanza de vida en nuestro país).
Sin embargo, muchas personas no piensan en su jubilación hasta que quedan pocos años para llegar a ese momento.
Si quieres empezar a planificar tu jubilación, puedes empezar respondiendo a las siguientes preguntas:
¿Qué gastos tendrás cuando te jubiles?
- Vivienda: La jubilación puede significar un momento de cambios en la vivienda, como puede ser la finalización del pago de la hipoteca o un cambio de residencia a una zona más tranquila. También puede acarrear posibles reformas o adaptaciones al inmueble.
- Salud: Con el paso del tiempo pueden aumentar los gastos médicos y/o farmacológicos.
- Transporte: Se pueden reducir los gastos en transporte, al no tener la obligación de desplazarse cada día al trabajo o tener un segundo vehículo.
- Ocio: En muchos casos, se llega a la jubilación con mejor salud y con ganas de disfrutar la vida, hacer viajes y desarrollar viejas y nuevas aficiones. Esto puede suponer más gastos.
Ten en cuenta también que el coste de la vida cambia a lo largo de los años y, aunque no podrás adivinar su evolución futura, debes tenerlo en cuenta porque la mayoría de bienes y servicios se encarecen a lo largo del tiempo.
¿Cuál será tu pensión pública de jubilación?
Ésta es una pregunta que se hace mucha gente cuando se acerca la edad de jubilarse, pero se le debería dar importancia a lo largo de toda la vida laboral.
Para obtener una estimación de la pensión de jubilación, existe el simulador de jubilación de la Seguridad Social, que te permitirá comprobar la edad en la que podrás jubilarte así como la cuantía que cobrarás en función de tus cotizaciones hasta el momento.
¿De qué otros recursos económicos podrás disponer de necesidad?
Al margen de la pensión de jubilación, tu situación económica general y tu patrimonio tendrán un gran impacto en tu jubilación:
- Propiedades inmobiliarias: Ser propietario de tu vivienda habitual evitará que tengas que gastar dinero en alquileres, pero también puede ayudarte a complementar la pensión con la vivienda habitual.
- Ahorros: Haber acumulado ahorros te servirá para tener una almohada económica a la hora de afrontar posibles imprevistos durante la jubilación y la vejez. Por eso es tan aconsejable aplicar técnicas como el preahorro durante la vida laboral.
Es importante que planifiques la jubilación con tiempo, no sólo cuando estés al final de tu vida laboral, y que realices una previsión de los recursos económicos que tendrás. Todo esto te ayudará a afrontar esta etapa con mayor tranquilidad.
Y si quieres mejorar la gestión de tu economía personal y familiar, te recomendamos que realices el Curso Digital de Educación Económica del programa EdEc.